Algunos países del mundo han logrado frenar el avance del coronavirus y poco a poco van volviendo a la normalidad. Uno de esos casos es el de Corea del Sur, cuyos primeros casos se dieron en quincena de febrero, pero a la fecha solamente registraron 10.874 personas contagiadas; por dicha razón, actividades como el fútbol han regresado.
En la nación asiática han tomado todas las medidas y protocolos necesarios para que el balompié vuelva a la acción. Sin embargo, los protagonistas toman precauciones antes, durante y después de los partidos. Un ejemplo de ello se vivió este sábado 9 de mayo en la Liga de Segunda División.
Chungnam Asan y Bucheon 1995 se enfrentaron en la primera jornada de la K League 2 de Surcorea, y a los seis minutos del primer tiempo sucedió un hecho insólito, que quizás pueda repetirse en distintas canchas de fútbol del planeta. ¿Qué pasó? El árbitro no quiso darle la mano a uno de los jugadores.
Jefferson Baiano, del Asan cayó sobre el césped luego de que un deportista del cuadro rival le cometiera una falta. El juez se acercó y cobró el foul de inmediato, y el brasileño le estiró el brazo para que lo ayudara a ponerse de pie, pero el colegiado le hizo una señal de negación ante la sorpresa y risa del sudamericano.
Al final, el Bucheon ganó por la mínima diferencia (1-0) y sumó sus primeros tres puntos en el campeonato local. El hecho entre el futbolista y el árbitro quedó en una simple anécdota dado que nadie reclamó nada y reconocieron que son acciones que deberán hacerse más seguidas por los tiempos de pandemia que se vive.