¿El 30 de abril es feriado o día no laborable en Perú?

It’s the economy, stupid!

El debate del domingo quizá se centre en la economía.

Si a la estrategia de segunda vuelta de Fuerza Popular, sustentada en que un eventual gobierno de Pedro Castillo implicaría el establecimiento del comunismo en el Perú, ya se le acabó el ‘millaje’, si alguna vez lo tuvo, el último recurso que le quedaría a Keiko Fujimori en los últimos diez días de la campaña y, especialmente, este domingo en el debate presidencial de Arequipa, es la comparación de las consecuencias de la decisión del 6 de junio en la economía de los ciudadanos y en la generación de empleo.

A Bill Clinton le fue estupendo utilizar la frase “es la economía, estúpido”, creada por su asesor en la campaña de 1992, James Carville, en medio de la recesión durante el gobierno de George HW Bush, quien iba a la reelección.

A Luis Carranza también le fue muy bien el domingo en el debate técnico frente a Juan Pari, a quien le pasó el carro de ida y vuelta. Él explicó luego que “sí tenemos propuestas, pero no medimos bien el tiempo”, aunque no se le debe atribuir a él toda la responsabilidad del papelón pues la verdad es que las ideas económicas de Perú Libre y de Castillo son una cantinflada.

Estatizaciones, expropiaciones, sustitución de importaciones, decir que todo se arregla gastando el 10% del PBI, como si este fuese un chicle eterno, entre otros desaguisados camuflados con la mención del ‘pueblo’ y de arengas bien intencionadas, pero vacías, es lo que propone hasta ahora Castillo.

Como se dice en las redes, más que el chavismo de Hugo Chávez, lo que Castillo ofrece es un chavismo del Chavo del Ocho, perfilando un cambalache económico sin que, hasta ahora, muestre la menor intención de exponer un plan económico serio.

Es un costo que ya se deja sentir. Según la encuesta en el SAE de Apoyo Consultoría, el 75% de las empresas ha detenido sus inversiones de corto plazo por la elección, y un eventual gobierno de Castillo llevaría la confianza a su mínimo histórico: -85 puntos.

El triunfo de Castillo ya es difícil de revertir, pero no imposible, como lo demostraron Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski, quienes remontaron la diferencia que les llevaba Keiko Fujimori dos semanas antes de las elecciones de 2011 y 2016. Pero la única manera de lograrlo “es la economía, estúpido”.

Newsletter Augusto Álvarez Rodrich en LR

Suscríbete aquí al boletín de Augusto Álvarez Rodrich en La República y recibe en tu correo electrónico, todos los viernes, las ediciones de su programa “Claro y directo” y su columna diaria.