Pandemia que es problema y posibilidad
No es momento de reformas, pero tampoco de olvidarlas.
Siendo la pandemia un gran problema, no debiera haber duda de que, como planteaba Jorge Basadre, simultáneamente, sea gran posibilidad.
Mañana en el Congreso, por ejemplo, el plan general de gobierno que presentará el gabinete Cateriano seguramente estará centrado en la solución de los apremios del momento –primero, derrota de la pandemia; segundo, reactivación económica; y, tercero, elección transparente y transferencia ordenada–, y en tratar de que las decisiones del presente perturben lo menos posible la viabilidad del futuro.
Los indicadores recientes de la evolución de la pandemia en el país, con los récords diarios de contagios y de muertes, sugieren que lo peor aún está por venir, sin que existan plazos previsibles de cuándo acabará la pesadilla.
La prioridad hoy es la sobrevivencia, lo cual constituye oportunidad poco propicia para iniciar reformas ambiciosas que preparen al país para que la siguiente pandemia o catástrofe no nos agarre con la precariedad con que lo hizo la actual, pero ello no implica dejar de tenerlas presente.
Como dijo la ministra María Antonieta Alva al inicio de la pandemia, en un adelanto de la desgracia que asomaba, “el Perú no puede estar entre los primeros en macroeconomía y los últimos en calidad de los servicios públicos”, una realidad cuya transformación implica un conjunto amplio de reformas.
Si algo bueno puede tener la pandemia que causa estragos en el país, es que ha hecho evidente la necesidad de cambios a fondo, conclusión que el presidente Martín Vizcarra recogió en su mensaje del 28 de julio: “Las crisis representan, al mismo tiempo, una oportunidad para fortalecer nuestra capacidad de respuesta, pero, sobre todo, para corregir las deficiencias históricas que nos permita afrontar en mejores condiciones los retos del futuro”.
Es imposible que con un gobierno de salida, con tantas urgencias para la sobrevivencia de la gente, y un congreso mezcla de mercado persa con sucursal de manicomio, se emprendan reformas. Lo mejor que se puede esperar hoy es que las soluciones a la pandemia no malogren la perspectiva futura, y que la elección no sea una competencia de planteamiento del absurdo, sino de construcción de un mejor mañana.
Newsletter Augusto Álvarez Rodrich en LR
Suscríbete aquí al boletín de Augusto Álvarez Rodrich en La República y recibe en tu correo electrónico, todos los viernes, las ediciones de su programa “Claro y directo” y su columna diaria.
Los artículos firmados por La República son redactados por nuestro equipo de periodistas. Estas publicaciones son revisadas por nuestros editores para asegurar que cada contenido cumpla con nuestra línea editorial y sea relevante para nuestras audiencias.