Devaluados y heridos por la pandemia
C19 también afecta a ideas, instituciones y potencias.
La pandemia no solo está produciendo muerte y desempleo, sino, también, la devaluación de varias instituciones, conceptos y hasta potencias, un asunto del que se ocupó en parte el viernes el programa 3D en el que tengo la suerte de conversar tres veces por semana con Mirko Lauer y Fernando Rospigliosi en RTV. Acá menciono algunas de las ideas de la tertulia y agrego otras.
El Congreso, gracias al pobre papel del actual que, rápidamente, ha revelado las mismas carencias, deficiencias y taras del disuelto hace poco, confirmando que hay un grave problema en la forma como se conforma esta institución que debiera ser clave para el país pero que, especialmente en esta pandemia, se vuelve parte del problema y no de la solución.
La regionalización, la cual ha desnudado sus debilidades de gestión para invertir con eficiencia y oportunidad los recursos que tiene, y para responder a una crisis como la actual, lo cual incluye a gobiernos regionales y municipales. Esta (des) organización del estado debe ser reformada.
La gran empresa privada ha constado en esta crisis que su desprestigio es profundo, lo cual le impide participar en el debate de las ideas y políticas que afectan sus operaciones. En este rubro, las AFP se llevan el premio mayor.
También, la izquierda, que busca figurar y recobrar espacio, pero con iniciativas lamentables, la última de las cuales es la procovid-19 de la formalización del taxi colectivo plantada por el Frente Amplio. La derecha va igual, especialmente la DBA con planteamientos como reiniciar el ataque a la educación inclusiva usando una defensa idiota y racista del castellano.
Estados Unidos acelera en esta crisis su declive en su papel de potencia mundial, gracias a la presidencia de Donald Trump, mientras a Brasil le pasa lo mismo en la región por ese otro impresentable que es Jair Bolsonaro.
La prisión preventiva es otro concepto en declive en la crisis y, con ello, el papel de los fiscales del equipo especial y los jueces que la han usado con abuso.
Por último, en esta lista incompleta y arbitraria de conceptos devaluados por la pandemia está la oficina como lugar de encuentro para trabajar, una expresión más de que todo va a cambiar pues ya no estaremos tan juntos.
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