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Se volvió ‘loco’: David Alaba reveló los detalles de su mítica celebración con la silla

El defensor austriaco explicó por qué decidió festejar de esa manera durante la remontada ante el PSG por la Champions League.

David Alaba llegó al Real Madrid procedente del Bayern Múnich. Foto: Twitter Real Madrid
David Alaba llegó al Real Madrid procedente del Bayern Múnich. Foto: Twitter Real Madrid

Desató su felicidad. Más allá de la deslumbrante actuación de Karim Benzema en el Santiago Bernabéu, hubo otros jugadores que fueron claves para lograr la remontada ante el PSG por la Champions League. Una de las postales que dejó el compromiso fue protagonizada por David Alaba, el defensor no solo destacó por su rendimiento, también se volvió viral por su efusiva celebración con una silla.

Luego de que el goleador francés anotara el 3-1, el central austriaco corrió hacia la tribuna para festejar y levantó dicho objetivo. “Es bueno probar nuevas celebraciones de vez en cuando. Y la silla estaba bien. No lo pensé mucho, solo di rienda suelta a mis emociones. Con una remontada tan espectacular te puedes volver loco”, reveló en diálogo con Sport1.

Revive la curiosa celebración de David Alaba

Si bien los comandados por Carlo Ancelotti lograron avanzar de fase, hubo un momento en el que el resultado se tornó adverso y todo indicaba que el cuadro parisino se quedaría con la serie. “Incluso después de recibir un gol nos mantuvimos tranquilos y seguimos presionando. En mi primera temporada en el Madrid no quería que me echaran en los octavos de final. Todos creímos en la victoria”, acotó.

Uno de los aspectos que más resaltó fue el apoyo de los hinchas merengues. Horas antes del partido, los aficionados tomaron las calles de la capital española y muchos acompañaron el trayecto del bus hacia el estadio; asimismo, en el campo de juego se pudo observar un clima de fiesta.

Sabíamos que el partido sería diferente en el Bernabéu y que nuestra afición y el ambiente serían un factor decisivo. El ambiente en el estadio fue muy especial. Sabía, por mis visitas anteriores al Bernabéu, que es un estadio que puede desarrollar un poder propio. Ese fue el caso contra el PSG. La afición nunca nos dejó solos en el campo, animaron todo el partido y los pudimos recompensar. Fue una noche mágica”, puntualizó.