Municipal vs. Universitario: la ‘Academia’ da una lección a los ‘cremas’

El fútbol es tan impredecible que el balón nunca podrá ser visto como una bola mágica de cristal donde se pueda ver el futuro. Municipal venía de no ganar doce fechas en el torneo -el último triunfo fue el 14 de julio-, llegaba con problemas económicos y el fantasma del descenso que estaba acechando. Pero la ‘Academia’ había preparado su mejor lección para este día.

Todos habían jugado para la ‘U’, pero se olvidaron de hacerlo para ellos mismos. El escenario era inmejorable: Alianza Lima empataba en casa, Cristal tenía la chance de trepar pero cae como local y llegaba el turno de los cremas. Con un triunfo regresaban a lo más alto de la tabla. La fiesta estaba lista, los hinchas llenaban las tribunas del Nacional pero los que terminaron festejando fueron otros.

La presión alta, una enfermedad detectable, es en el fútbol una virtud de los equipos modernos. Municipal sorprendía al no darle espacios al equipo de Ángel Comizzo, confundido entre la presión y las pocas opciones en ataque. Entonces un tiro libre que algunos pidieron que fuera penal se convierte en una parábola perfecta que sale del pie derecho de Jeremías Bogado (22’) para que José Carvallo -tantas veces figura- volara como un mortal.

La ‘Franja’ se prendía cada vez más roja mientras la ‘U’ solo asustaba con la primera jugada colectiva que terminaba en un tiro desviado de Guarderas. En el segundo tiempo, la consigna era apelar a la garra como argumento pero para ganar un partido se necesita más que eso.

El segundo golpe era con un potente tiro de Fabricio Cabrera que Carvallo manotea y la ‘U’ se desesperaba ante un escenario imprevisto. Solo Hohberg trataba de salir del molde y crear peligro. Tuvo un par de chances pero luego fue más emoción que claridad. El tiempo se convirtió en el peor enemigo, los minutos pasaban y no hubo más argumento hasta que en los descuentos, un penal que Jorge Obregón concreta para la goleada final 3-0. Municipal no ganaba en el torneo desde hace 120 días.

Hay varias explicaciones que aparecen como teorías comprobables: han pasado cinco partidos donde la ‘U’ solo ha podido anotar un gol, pero su producción está amarrada con su juego que se volvió predecible y sin sorpresa. A pesar del constante desequilibrio de Hohberg, con solo un as bajo la manga es complicado ganar. A eso se le sumaron bajas sensibles como Aldo Corzo o Armando Alfageme y Alberto Quintero. Sin parte de la columna vertebral, la ‘U’ no caminaba al mismo ritmo.

Algunos miraban el fixture y creían ser favoritos al solo quedarle una salida fuera de Lima, pero el fútbol, siempre impredecible, le negaba las chances ante su bajo rendimiento. Ayer, en solo un partido, le marcaron tres (42,85%) de los siete goles que les han hecho en el torneo. A pesar de que Halloween ya pasó, fueron 90 minutos de terror.

Mientras el torneo parece el de las oportunidades perdidas, parece que logrará el título el que se equivoque menos.

Ángel Comizzo, DT de la ‘U’:

“Quiero asumir la total responsabilidad, si hay algún error, es mío. Le pido disculpas a la gente, el rival jugó muy bien, nosotros no”.