Una mujer indignada por la agresión verbal hacía su hijo publicó una carta en Facebook, dando a conocer el horrible momento que le tocó vivir junto a el menor dentro de un centro comercial, donde fueron víctimas de una enojada mujer.,A través de Facebook, miles de usuarios han expresado su rechazo hacía actitud que tuvo una mujer contra niño que no puede hablar en un centro comercial de Estados Unidos. Hannah Sewell es el nombre de la madre del pequeño Caden, quien jamás se imaginó que su pequeño hijo quien tiene un padecimiento que le impide el poder hablar terminaría siendo víctima de una agresión verbal por parte de una completa desconocida al ir a comprar. PUEDES VER Facebook: La reacción de un gato en adopción tras ser acariciado conmueve a miles. El hecho se dio cuando el pequeño Caden se percató que su madre llevaba dentro del carrito de compras un paquete de las manzanas que más le gustaban, a lo que el menor se mostró emocionado corriendo y saltando por todo el lugar. Es entonces cuando una mujer se dirigió hací Hanna Sewell, madre del niño, pidiéndole que calmara a su hijo porque según expresó estaba incomodando a las demás personas que ahí hacían sus compras. A lo que Hanna respondió disculpándose e indicando que su hijo sólo estaba emocionado. Lo que no esperaba era que la mujer que tenía un rostro de incomodidad se acercaría al pequeño, quien pensaba que se acercaban a él con la intención de saludarlo y le diría: “¿Qué pasa contigo, tu mamá nunca te lleva a ninguna parte?”. No contenta con eso empezó a recriminar porque no le respondía nada. Ante tal actitud Hanna le respondió que su hijo, Caden, no podía hablar, pero aún después de indicar esto, la ofendida mujer respondió: “No es sorprendente, ni siquiera puede caminar por una tienda”. El pequeño Caden Quedó realmente afectado por todo lo sucedido y pese a los esfuerzos de su madre por animarlo, nada cambió. En Facebook, Hanna Sewell publicó una carta para hacerle saber a la mujer lo mucho que hirió a su hijo: “…No sé si lo notaste, pero rompiste su corazón y el mío cuando lo hiciste. Dejé todas mis compras y salí de la tienda. Lo llevé a Wendys, su lugar favorito. Pensé que le gustaría comer algunos nuggets de pollo y las rebanadas de manzana que le encantan porque son de diferentes colores y puede alinear los colores en su bandeja. Pero él no se emocionó. Él no sonrió ni saltó. Simplemente se sentó allí con la mirada más triste de su rostro mientras miraba su comida. Espero que estés feliz contigo misma”. Se puede leer en una parte de la carta. Rápidamente la publicación se viralizó y llegaron cientos de mensajes en apoyo a Hanna y Caden.