La Cámara Peruana de la Construcción (Capeco) reveló que, en el año 2020, la construcción formal en la región imperial disminuyó en un 28,2%.
Pese a la caída, según el sondeo a empresas del sector construcción en Cusco, la proyección de crecimiento para este año es del 24,2%, sobre todo en el cuarto bimestre.
Otro dato preocupante de Capeco es que el déficit habitacional creció en 7,5% en la región. Así las cosas, la falta de vivienda afecta a un 17% de los hogares cusqueños.
Contradictoriamente, en los primeros cinco meses del presente año apenas se efectuaron 12 operaciones del Fondo Mi Vivienda en Cusco, lo que a nivel nacional representa al 0,2% del total de colocaciones de este fondo que ofrece bonos a los beneficiarios.
El año pasado, el impacto de Mi Vivienda fue igual de desalentador. Los créditos alcanzaron solo las 21 operaciones, 0,3% del total en el país.
Desde hace ocho años Cusco no logra tener una participación mayor a 1% del Fondo Mi Vivienda. El impacto de Techo Propio también sería insignificante.
Por otro lado, los precios de las viviendas en oferta en Cusco tuvieron un incremento (8%) en la primera mitad del año y se prevé que en los siguientes meses aumentarían en 15%.