Lamentable. Dos pequeñas hermanas fueron fulminadas por un rayo. El trágico hecho que enlutó a una familia se produjo en la comunidad campesina de Cauchiri, distrito de Ñuñoa en la provincia de Melgar, Puno. Hace menos de una semana, un trabajador del campo sufrió la misma suerte.
De acuerdo a información policial, alrededor de las 15:00 horas del domingo último, recibieron un pedido de auxilio por impacto de rayo. Al llegar al lugar, encontraron los cadáveres de dos niñas de 7 y 10 años en posición de cubito dorsal. Ambas presentaban quemaduras y otros signos de fulguración.
El representante del Ministerio Público, José Ted Zambrano Murillo, fue notificado del hallazgo y se trasladó a la zona para emprender las diligencias de ley. El fiscal ordenó el levantamiento de los cadáveres y su internamiento en la morgue de la jurisdicción, donde determinaran las causas de muerte.
Trascendió que las dos hermanitas estaban laborando el campo, pasteando sus alpacas y ovejas. Es entonces que cayó sobre ellas una potente descarga eléctrica, que acabó con sus vidas de manera inmediata.
Hace solo 6 días, un campesino de la comunidad de Churumaquera, del distrito de Ilave, provincia puneña de El Collao, falleció en las mismas circunstancias. Miguel Maquera Cutipa de 70 años fue fulminado durante las intensas lluvias y nevadas que azotaron a Puno y causaron graves estragos, en especial, en las localidades altoandinas.