Policía ubica la guarida del sujeto que abusó de cuatro menores

En la Victoria. El mismo día que una de sus víctimas lo denunciaba, Víctor Fernández abusó de otra menor.,"Era un cuarto oscuro, pequeño, frío (...). Recuerdo que el pasillo era angosto", relató a la Policía una de las cuatro menores que acusan a Víctor Hugo Fernández Romero (23) de haberlas drogado y vejado en un lugar desconocido para ellas, tras ser contactada por él a través de las redes sociales. La habitación es exactamente así. Queda en el segundo piso de un inmueble de material noble, en el distrito de La Victoria. Mide aproximadamente tres por cuatro metros y para llegar hasta allí se pasa por un estrecho camino donde hay una fila de cuartos y una gran cantidad de inquilinos que hoy aseguran no haber visto ni oído nada las cuatro veces que Víctor Hugo llevó a sus víctimas. PUEDES VER “Arruinó mi vida, ojalá lo atrapen”, dice víctima de violador en serie Los agentes de la comisaría de Apolo han llegado a ese predio para preguntar por Fernández. Allí, con una copia del contrato de alquiler en mano, confirmaron que el sujeto se hospedó desde inicios de junio del 2016, cinco meses antes de iniciar su serie de ataques sexuales contra adolescentes de bajos recursos. Cayó y lo liberaron Pero además de hallar su guarida, los agentes PNP a cargo del caso han descubierto que una semana después de atacar a su penúltima víctima, la joven de iniciales L.M.L.S, Víctor Hugo Fernández fue detenido en Jicamarca. Fue luego de que L.M.L.S. lo denunciara en la comisaría de ese sector. Y esa misma noche, el 19 de noviembre del 2016, mientras ella daba su testimonio a la Policía, él llevaba a otra víctima hasta su cuarto alquilado. Dos días después de haber formalizado su denuncia, acompañada por su hermano, padre, madre y efectivos de la Policía, la adolescente citó a su agresor en un centro comercial de la avenida Próceres, en San Juan de Lurigancho. "Él sospechaba que iría con mi familia, por eso intentó cancelar la cita muchas veces, pero al final fue", contó la joven a La República. Cuando por fin la vio, sola, porque los demás se ocultaron, se acercó a ella para conversar unos minutos antes de ser intervenido por la Policía y llevado a la comisaría para ser interrogado. Sin embargo, solo estuvo unas horas. "Dijeron que no estaba en flagrancia y, como no tenía requisitoria, lo dejaron libre con una citación para que regrese a continuar su testimonio. Obviamente, él nunca volvió", declaro la menor. L.M.L.S. reclamó el accionar policial en ese momento, pues en su declaración Fernández Romero aceptó haber mantenido relaciones sexuales con la menor. Por el momento, él continúa desaparecido. La Policía ha intervenido otros dos inmuebles donde se alojó durante un largo tiempo, pero los dueños dicen no reconocer al acusado. No se descarta que haya más víctimas.