Este domingo 2 de octubre, se realizarán las elecciones en Brasil, en las que el ultraderechista Jair Bolsonaro busca salir reelegido y asumir la presidencia del país sudamericano por segundo periodo consecutivo.
Durante sus cinco años de mandato, el candidato por el Partido Liberal estuvo siempre en el ojo de la tormenta, sobre todo por restar importancia a la pandemia de la COVID-19. También minimizó luchas como la del medio ambiente, derechos de pueblos originarios y comunidad LGTBIQ+, el aborto, entre otras.
Jair Bolsonaro nació en São Paulo el 21 de marzo de 1955. Durante su juventud, se dedicó a la vida militar y se especializó en paracaidismo. Llegó a integrar la Brigada de Infantería Paracaidista y alcanzó el rango de capitán en el 8.º Grupo de Artillería de Campaña Paracaidista.
Su carrera política inició en 1988 como concejal de Río de Janeiro por el Partido Demócrata Cristiano. Durante ese tiempo, fue ganando notoriedad debido a sus ideas nacionalistas y conservadoras, los comentarios en defensa de la dictadura militar y su crítica contra la izquierda.
Jair Bolsonaro cerró su campaña electoral paseando en bicicleta. Foto: EFE
Algunas de sus frases más lamentables al afirmar que “el régimen militar tenía que haber terminado el trabajo matando a unos 30.000″; o la vez que le dijo a una diputada que era “demasiado fea para ser violada”. Una vez señaló que prefería que su hijo se muera en un accidente a que se declare homosexual.
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Esto le valió para sumar adeptos, hasta que en 2010 postuló al Parlamento y entró como el undécimo diputado federal más votado del estado de Río de Janeiro, con 120.000 votos.
Jair Bolsonaro postuló a la presidencia de Brasil en 2018 con el Partido Liberal. La popularidad que ganó en diversos sectores, gracias a sus comentarios polémicos, le permitió sacar un 46,03% en la primera vuelta y un 55,13% en la segunda. Finalmente, derrotó a Fernando Haddad del Partido de los Trabajadores.
Dichas elecciones polarizaron a la población de Brasil, país donde se realizaron marchas y protestas a favor y en contra de su candidatura. El momento más crítico fue cuando lo apuñalaron en el abdomen durante un mitin en la ciudad de Juiz de Fora, Minas Gerais. La vida del entonces candidato estuvo en peligro y el hecho indignó a la comunidad internacional.
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Durante su Gobierno, Bolsonaro flexibilizó las políticas de protección del medio ambiente, lo que ocasionó que, entre 2020 y 2021, la Amazonía perdiera 13.235 kilómetros, su cifra de deforestación más alta en los últimos 15 años. También lanzó fuertes calificativos contra la comunidad indígena al tildarlos de “indios hediondos, no educados y no hablantes de nuestra lengua”.
Jair Bolsonaro, durante toda la pandemia, ha negado siempre la gravedad del nuevo coronavirus. Foto: captura/TV Brasil
Jair Bolsonaro tomó una postura negacionista contra la pandemia de la COVID-19 al mostrarse en contra del confinamiento, el uso de mascarillas y las vacunas. A pesar de que Brasil superó las 600.000 muertes por coronavirus, y que él mismo llegó a contagiarse, se refirió a la enfermedad como una “gripecita”.
De esta manera, Bolsonaro nunca llegó a vacunarse y la misma Corte Suprema de Brasil le abrió una investigación por difundir informaciones falsas.