“Pero a ti no te amarán como te amaba yo”. Ernesto Cardenal, autor de ‘Epigramas’, había sido suspendido por Juan Pablo II. El papa Francisco revocó la moción.,El papa Francisco revocó la suspensión que pesaba sobre el célebre autor de ‘Epigramas’ Ernesto Cardenal. En 1985, el Vaticano le había impedido ejercer sus funciones sacerdotales debido a su participación política en la ‘Revolución de Nicaragua’. Este martes la Nunciatura Apostólica en Nicaragua explicó que el papa Francisco levantó la “suspensión a divinis” impuesta al sacerdote de 94 años. Ernesto Cardenal está internado desde el 4 de enero en un Centro Médico de Managua, debido a una infección renal. PUEDES VER Ernesto Cardenal: “La poesía es anuncio y denuncia” Ernesto Cardenal había recibido esa sanción debido a que formó parte de la denominada ‘Revolución popular sandinista’. El miembro de la Iglesia católica se manifestó en contra de la dictadura de Anastasio Somoza en Nicaragua. El religioso fue nombrado ministro de Cultura por el gobierno de los “revolucionarios” el mismo día que ellos llegaron al poder. Como la actividad política está prohibida por el derecho canónico, el papa Juan Pablo II lo reprendió públicamente en 1983 y lo suspendió un año más tarde. Además de ser conocido como uno de los defensores de la ‘Teología de la Liberación’ en América Latina, es un conocido poeta. “Muchachas que algún día leáis emocionadas estos versos y soñéis con un poeta: sabed que yo los hice para una como vosotras y que fue en vano”, escribió Ernesto Cardenal en ‘Epigramas’, uno de sus libros más populares. “El Santo Padre ha concedido con benevolencia la absolución de todas las censuras canónicas impuestas al reverendo padre Ernesto Cardenal, acogiendo la petición que éste le había presentado recientemente, a través del Representante Pontificio en Nicaragua, de ser readmitido al ejercicio del ministerio presbiteral”, indicó el embajador del Vaticano en Nicaragua, Waldemar Stanislaw Sommertag, según ACI Prensa. El nuncio apostólico explicó que los motivos para que el papa Francisco revocara la suspensión de Ernesto Cardenal se debía a que el sacerdote aceptó la pena canónica que le impuso el Vaticano y abandonó su militancia política.