Tras ocho días. Heridas sufridas por Fernando Ruiz el día que quemó a su ex conviviente Marysella Pizarro le provocaron una grave infección y luego un paro respiratorio.,Fallece sujeto cuyo crimen conmocionó a Tarapoto y al país,Fallece sujeto cuyo crimen conmocionó a Tarapoto y al país,El lunes en la noche, como presintiendo lo que le iba a ocurrir, Fernando Ruiz del Águila tomó aliento y le dijo a Diego, el mayor de sus hijos, lo siguiente: “Hijo, perdón por todo, cuida a tus hermanos”. Horas después perdió el conocimiento y no volvió a expresar palabra alguna. Ayer, al promediar las 2:45 de la tarde, Fernando, el hombre que asesinó a su ex pareja Marysella Pizarro Tuanama prendiéndole fuego en el salón de belleza donde esta trabajaba en Tarapoto, murió a consecuencia de una insuficiencia respiratoria. PUEDES VER Tarapoto: mató a su expareja tras hacer un tanque de gas en la peluquería en la que trabajaba “El señor hizo un cuadro de infección generalizada que se concentró mayormente en los pulmones. Ello le ocasionó esa insuficiencia que derivó a su vez en un paro respiratorio”, informó a La República una fuente del Hospital de Contingencia donde Fenando Ruiz estuvo internado durante los últimos ocho días. Inmediatamente sus familiares acudieron al nosocomio y uno a uno iban confirmando la noticia, volviendo a abrirse en ellos las heridas que la muerte de Marysella había dejado el lunes de la semana pasada, suceso que conmocionó a Tarapoto y al país entero. No guarda odio “Yo no odio a mi padre, yo no le guardo rencor porque hacerlo me haría mucho daño, y odio es lo que menos quiero ahora para mí porque debo ser un ejemplo para mis hermanos”, señala Diego Ruiz Pizarro (19), el mayor de los cuatro hijos que dejó la pareja. Diego es consciente de que ahora, sin la presencia de sus padres, deberán salir adelante superando, con ayuda profesional, este trágico capítulo que les ha tocado vivir. “Esto es muy duro, pero no es cierto que nosotros como hijos vayamos a repetir la historia a futuro. Vamos a ser buenos y a partir de ahora tendremos ayuda psicológica”, dice esperanzado. Para Diego, su padre era una persona responsable que se preocupaba por él y por sus hermanos, pero que en los últimos meses presentaba actitudes obsesivas hacia su madre. De Marysella asegura que era una madre sacrificada por ellos. Prefiere quedarse con ese recuerdo de ambos. Últimas acciones “Recuerdo que a eso de las 11 de la mañana lo vi y le pedí que me hiciera una carrera porque como ve, tengo un negocio de venta de menú. Me faltaban ajos y me llevó al mercado. Volvimos y nos despedimos. Nadie de la cuadra se iba a imaginar que él haría eso porque no demostraba ser una persona violenta”, cuenta Francisco Icurima, vecino de Fernando, el último pasajero a quien Ruiz del Águila transportó en su mototaxi. “Ahora sabemos que, luego de eso, Fernando llevó a su hijo al colegio, pero antes pasó por el grifo Melchorita y compró el combustible, dejó a mi sobrino y se fue directo al centro (de Tarapoto)”, comenta Ludith Ruiz, su hermana. “Con la muerte del imputado se extingue la acción penal. No habría a quién sancionar. Hasta el momento las investigaciones determinan que este hombre actuó solo. Como medio probatorio sabemos dónde compró el combustible y él mismo realizó la acción sin ayuda de nadie. Él lo declaró y nosotros lo hemos acreditado”, informó por su parte Nelly Verona Farro, titular de la Primera Fiscalía Provincial Penal de Tarapoto, quien se alistaba a procesarlo por el delito de feminicidio. La magistrada iba a solicitar una pena de 35 años de cárcel para Fernando Ruiz por la muerte de su ex conviviente y la amiga de esta, la cosmetóloga Tirsa Cachique.