Invisibilizados. Desde la época del terrorismo se tienen registros de asesinatos contra miembros de la comunidad LGTBI. Aquí un breve recuento de algunos casos.,En su informe, la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR) dio cuenta de que en febrero de 1989, el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) asesinó a un joven y abandonó su cadáver con un cartel en el que se leía "así mueren los maricones". Tres años antes, Sendero Luminoso hizo lo propio en Aucayacu (Tingo María), al asesinar a 10 homosexuales. PUEDES VER: El Ejecutivo insistirá con ley que sancione los crímenes de odio ¿Estos antecedentes son válidos para considerarlos como crímenes de odio? La respuesta es sí. CASOS RECIENTES Los crímenes de odio contra miembros de la comunidad LGTBI en el Perú existen, prueba de ello fueron la preocupación y el rechazo expresados por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) ante los crímenes cometidos en los últimos años, ello a raíz de un asesinato cometido contra una menor de edad en mayo del 2016. La víctima tenía 14 años y era natural de Trujillo, en La Libertad. Era una joven transexual que recibió cuatro balazos en la cabeza. Su nombre era Zuleimy Aylen Sánchez Cárdenas. Así, Unicef instó a las autoridades peruanas a “adoptar las medidas necesarias que permitan prevenir estos actos de violencia y promover en el país una cultura de paz, respeto y tolerancia que garanticen a todos los niños, niñas y adolescentes su derecho a crecer libres de todo tipo de violencia y discriminación”. El caso de Zuleimy no es el único. A él se suman los casos de Arturo Jimenes Borja (asesinado en el 2000), Roberto Izquierdo (2009), Enrique Arméstar (2012), Adolfo Ormeño (2012), Alex Quiroga, Rubí Bravo, Joel Molero y Kerwin Lázaro Morales (2013). También los casos de Naomi Martínez Franco y Evelyn Mora (2015). Según Promsex, solo en el 2016 hubo 8 crímenes de odio, 43 agresiones y 23 actos discriminatorios registrados. La clave Justamente para seguir la línea de prevención que pedía implementar Unicef, el Ejecutivo presentó el DL Nº 1323, que en su primer artículo consideraba de forma expresa la discriminación por orientación sexual como agravante ante un homicidio. Pero el DL fue derogado.