Lluvias en Áncash y La Libertad provocan colapso de puentes y destruyen cementerio

Más daños. Crecida de los ríos destruye vía de comunicación entre los distritos liberteños de Virú y Trujillo. Localidades ancashinas de Coishco y Santa quedaron incomunicadas.,Lluvias en Áncash y La Libertad provocan colapso de puentes y destruyen cementerio,Los huaicos remueven vidas y las destruyen, perturban la calma y el reposo, incluso el que se dice debe ser eterno. La mezcla de agua y lodo, como una metáfora de muerte, arrasó ayer el cementerio de Mampuesto, en Trujillo, y destruyó decenas de lápidas que terminaron sometidas a la fuerza de su avance. PUEDES VER: Áncash: Huarmey inundado y Chimbote lleva dos días aislado En algunas calles lejanas, como la avenida El Ejército, se encontraron restos humanos que fueron arrastrados entre los escombros y desperdicios. Avanzaron por calles convertidas en ríos imparables, inundadas por el quinto huaico que esta ciudad ha soportado en menos de cuatro días. La imagen de la Plaza de Armas, inundada tras activarse la quebrada San Ildefonso, trajo a la memoria los peores recuerdos de 1998, cuando el fenómeno El Niño provocó daños similares. No fue el único drama. Por la noche, la provincia de Virú, en La Libertad, quedó sin conexión a Trujillo porque colapsó el único puente que une ambas localidades. En Piura, que también duerme y despierta entre aniegos, el agua potable es escasa. Por eso, muchos han optado por juntar la lluvia en recipientes. La noche del viernes, varios sectores de esa ciudad soportaron precipitaciones que se prolongaron hasta la mañana del sábado. Por la tarde volvió a llover sobre las calles ya afectadas, aunque esta vez con una intensidad que encendió las alarmas. Tumbes también amaneció con lluvias. En algunos sectores, el agua acumulada llegó al medio metro de altura y afectó colegios, viviendas y locales comerciales. En la región Áncash, la crecida del río Shishu provocó el colapso del puente que une los distritos de Coishco y Santa, en la provincia del Santa. Miles de familias han quedado aisladas y, al no existir ruta alterna entre ambas jurisdicciones, los precios de algunos productos no tardaron en elevarse. Sobre la provincia de Huarmey, donde las lluvias e inundaciones ya han dejado más de 40 mil afectados, se reportó la desaparición de cinco personas y la muerte del anciano Antonio Tang. La ciudad no tiene energía eléctrica, lo que ha perjudicado el funcionamiento de hospitales, comisarías y negocios. La circulación hacia Casma se ha interrumpido por el derrumbe del puente Sechín. Y las calles de Chiclayo, en la región Lambayeque, siguen inundadas, problema que se ha complicado por la acumulación de basura en las esquinas. En esta provincia se elevaron a 160 los casos confirmados de dengue. Al menos 50 hectáreas en el distrito cajamarquino de Cachachi terminaron destruidas tras el desborde del río El Chiminero. Unas 60 familias habrían resultado afectadas, según los primeros reportes. Para hoy, los pronósticos no dejan de ser preocupantes. Tumbes, Piura, Chiclayo y Trujillo, entre otras ciudades, siguen expuestas a las lluvias.