Melodías para Ana Paula

Era un regalo para Ana Paula. En abril del 2022, la familia del profesor universitario Julio Aldana (37) pasaba por un momento duro. La pequeña Ana Paula, de seis años, terminaba su tratamiento oncológico. Meses atrás, los médicos le habían encontrado un sarcoma cerebral. Una masa maligna que aparecía en las tomografías hecha a su cabecita le había causado desmayos y fotofobia (sensibilidad exacerbada a la luz) por lo que sus padres, Julio y Marcela Soncco la internaron en hospital Edgardo Rebagliati de EsSalud.

La niña, a la que le encanta ir a la playa, tenía cáncer al cerebro. Tuvieron que operarla para extirparle el tumor. El procedimiento coincidió con su cumpleaños. “Le cantamos el happy birthday de camino a la sala de operaciones”, recuerda Julio. Luego, como olas que revientan una tras otra, vinieron las tandas de siete quimioterapias y 33 radioterapias. “En esa época hacía teletrabajo. He tenido que dar clases desde el hospital para estar junto a mi hija”, cuenta Julio.

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Para mayo del año pasado, Ana Paula se recuperaba satisfactoriamente, y Julio y Marcela podían sentir cierto alivio. Sin embargo, las emociones que había dejado el cáncer aún estaban en el aire. Entonces Julio, que tiene afición por la música, que tuvo una banda de grunge de adolescente, decidió sacarlo todo componiendo melodías para su hija. Crearía un disco y sería un regalo para Ana Paula quien a su corta edad había corrido tremenda maratón en su lucha contra el cáncer. “Quería dejar un testimonio musical de todo lo vivido”, dice Julio.

Un testimonio de amor

Así nació Triage, un emotivo disco de seis temas, que pueden recordar a Pink Floyd o a Voz Propia, pero que suenan sobre todo al amor de Julio hacia su hija. “Quería dejar algo para ella que me sobreviva para que en el futuro lo vea y diga ‘mira, esto es lo que me dejó mi papá’”. Julio tituló a su disco Triage, porque aquel cubículo médico por donde pasan los enfermos al ingresar al hospital fue el espacio más transitado por su familia durante la enfermedad de su hija.

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Las canciones, que a veces son corales e incorporan piano, expresan la montaña rusa de emociones que vivió Julio durante la enfermedad: “Luz es el tema central, que expresa la esperanza y valentía de mi hija para enfrentar el cáncer”. Como dijimos, el disco se había concebido como un regalo para la niña. Su papá pasó madrugadas componiendo junto al productor musical Luis Álvarez, “Léolus”, en su estudio Ozymandias de Barrios Altos. Pero en el ínterin, Julio y Marcela entraron en cuenta de que no podrían costear las resonancias magnéticas que debían hacerle a su hija cada tres meses para sus controles oncológicos. “En Essalud hay un solo resonador, las citas son difíciles de conseguir, por eso le tenemos que hacer las resonancias de forma privada, y cuesta de 3.500 soles a más”, dice Julio.

Por esta razón, actualmente el joven docente ofrece su disco en las redes sociales para obtener fondos y así seguir costeando los exámenes médicos de Ana Paula. Ofrece un CD de seis canciones que cuesta 30 soles, y otro, que es un EP de cuatro temas, lo vende a 20 soles. Ambos vienen con un librito con las letras y el arte del disco que fue ilustrado por Marcela que es psicóloga. La oferta incluye, además, las melodías en formato digital. “Todo este proceso ha sido una terapia para poder enfrentar la enfermedad que tan tristemente atacó a mi hija, la música ha sido un refugio”, dice Julio, el profesor universitario que debutó en la música impulsado por el amor a Ana Paula.