La selección estadounidense femenina de fútbol sufrió una de sus peores derrotas fuera de las canchas. El reclamo judicial presentado por el representativo femenil del país norteamericano en pos de mejoras salariales fue desestimado por el juez Gary Klausner, quien falló a favor de la Federación de Fútbol de Estados Unidos (USSF) en la mayoría de los puntos denunciados.
La demanda, presentada el 8 de marzo del año pasado en el marco del Día Internacional de la Mujer, planteaba que las jugadoras recibieran la misma paga que sus pares masculinos, además de que sus condiciones de trabajo también sean iguales a las de estos.
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El juez argumentó su decisión indicando que “no se ha demostrado que a las jugadoras de la selección femenina se les pague menos que a los jugadores del equipo masculino”, pues llegó a la conclusión de que el sindicato que representa a las futbolistas arregló una serie de acuerdos que impidieron mejores ingresos y bonos por productividad para las deportistas.
En cuanto a las condiciones de trabajo, la selección campeona del mundo reclamó que su federación las hizo jugar más partidos en cancha sintética que al combinado de varones. El colegiado le dio la razón a la USSF y determinó que no existió un trato desigual.
Conocida la resolución, la capitana Megan Rapinoe se pronunció en redes sociales con un escueto mensaje: “Nunca dejaremos de luchar por igualdad”. Su compañera Alex Morgan también expresó su opinión por el mismo medio: “Aunque sea decepcionante escuchar estas noticias, esto no nos desanimará en nuestra lucha por la igualdad”.
Las demandantes, a través de su representación legal, anunciaron que apelarán este fallo.
Con información de AFP