El regreso de Tom Cruise a las nominaciones de la Academia de Hollywood y el récord de Steven Spielberg —candidato al Óscar en seis décadas diferentes— acapararon la atención en el almuerzo de los Óscar, celebrado este lunes en Beverly Hills.
Fotos, abrazos, palmaditas en la espalda, apretones de manos... Cruise fue la estrella de un evento en el que casi ninguna de las grandes figuras quiso desaprovechar su minuto de gloria junto al productor de Top Gun: Maverick, obra con la que vuelve a ser finalista 24 años después de su papel secundario en Magnolia.
El actor está nominado este año como productor de Top Gun: Maverick, que también protagoniza, y la cinta es candidata al Óscar a mejor película, el premio más prestigioso de Hollywood. “Ha sido increíble (...) Solo quiero que la gente vaya a los cines. Pero esto es precioso”, dijo Cruise a AFP señalando el salón de baile del Beverly Hills, repleto de nominados al Óscar y votantes de la Academia.
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Con la nominada a mejor actriz Michelle Yeoh. Foto: AFP
Por los brazos de Cruise, que no ha ganado ninguna estatuilla dorada hasta ahora, pasaron, entre otras personalidades, Jamie Lee Curtis, Austin Butler, Guillermo del Toro, Michelle Yeoh, Ricardo Darín, entre otros.
No obstante, el momento estelar llegó cuando Spielberg entró en el salón y se encontró directamente con Cruise, lo cual concentró toda una lluvia de flashes por parte de los fotógrafos.
Actor y director, que trabajaron juntos en cintas como Minority Report (2002) o War of the Worlds (2005), cruzaron miradas y conversaron por varios minutos en medio de carcajadas que acallaron los rumores acerca de una supuesta mala relación profesional entre ellos.
Al lado de la activista Malala Yousafzai. Foto: AFP
La activista paquistaní Malala Yousafzai, que asistió en calidad de productora ejecutiva de Stranger at the Gate, un corto documental sobre un marine veterano estadounidense, también se tomó fotos con Tom Cruise.
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“Es surrealista. Lo he visto en la pantalla y ahora lo veo en persona”, dijo a la AFP tras conocer a Cruise.
Otras caras conocidas como Brendan Fraser, Colin Farrell, Paul Mescal, Cate Blanchett, Angela Bassett o Ke Huy Quan también estuvieron presentes en la gala organizada por la Academia, que se desarrolla un mes antes de la celebración de cada edición de los Óscar y que sirve para reunir a los nominados de categorías técnicas o menos conocidas con los nombres más reputados de la industria.
La cita suponía la vuelta a un gran evento mediático impulsado por la institución tras el escándalo de la 94ª entrega de los Premios Oscar, en la que la bofetada de Will Smith al cómico Chris Rock por un chiste sobre la alopecia de su mujer dio la vuelta al mundo.
Con Jerry Bruckheimer y Guillermo del Toro. Foto: AFP
Conocedora de ello, la presidenta de la Academia de Hollywood, Janet Yang, basó su discurso para declarar de que el incidente ocurrido en 2022 fue “algo inaceptable”.
“Lo que vivimos el año pasado fue algo inaceptable. (...) Esto es una familia y deben primar los valores de unidad y solidaridad entre la industria y los espectadores”, sentenció.
Además, Chris Rock hizo mea culpa por la respuesta que se le dio a la cachetada, reforzando una posición que la Academia de Hollywood ya había hecho patente semanas después del altercado.
Junto a Jamie Lee Curtis. Foto: AFP
“Nuestra respuesta no estuvo a la altura, pero ha supuesto un punto de inflexión para actuar con mayor transparencia y responsabilidad”, concluyó. La 95ª edición de los Óscar tendrá lugar en el teatro Dolby de Los Ángeles el próximo 12 de marzo.