El diablo viste a la moda: elenco se reunió y reveló que Nate es el villano
Reparto se reunió por el quince aniversario del estreno del filme. Tras años de debate, finalmente se habló sobre el antagonista real.
El elenco y equipo de la popular película del 2006, El diablo viste a la moda, se reunió en un evento organizado por Entertainment Weekly para conmemorar el 15 aniversario de su estreno.
A lo largo de la conversación, el director David Frankel junto a Meryl Streep, Anne Hathaway, Emily Blunt, Stanley Tucci y otros compartieron sus experiencias en el rodaje de la cinta, además de discutir la relevancia social de su trama en la actualidad.
El verdadero villano de El diablo viste a la moda
De entre todo lo comentado, quizás el momento más esperado por los fans se dio cuando hablaron sobre el verdadero villano del filme. Como los fans siempre debatieron en redes sociales, se reconoció que Nate, el personaje interpretado por Adrian Grenier, es el antagonista de la historia.
“Nate no había crecido, pero Andy sí. No lo entendí en su momento, pero con el paso de los años comprendes por qué. Yo era tan inmaduro como él en ese momento, así que no pude ver sus defectos. Ella necesitaba más de la vida, y lo estaba logrando. Él no podía apoyarla como su novia lo necesitaba, porque era un chico herido y frágil”, explicó Grenier.
Por su parte, Anne Hathaway señaló que aunque era un poco inmaduro, podía entender de dónde venía la inseguridad de Nate en la trama. “No creo que todo el mundo sea completamente honesto consigo mismo, pero, ¿quién si? Todos hemos sido inmaduros en diferentes momentos. Tenemos que vivir, dejar vivir y hacer lo mejor que podemos con nuestras cosas”, sostuvo la actriz.
En The devil wears Prada, Nate es el novio de Andy Sachs (Hathaway), un chef que finalmente se separa de la protagonista al alegar que se convirtió en una persona gobernada por su jefa y que le da más importancia a su trabajo que a su romance.
Revive la reunión de El diablo viste a la moda
El diablo viste a la moda es una adaptación del libro del mismo nombre de Lauren Weisberger, inspirada en la época en que la autora trabajó junto a la editora en jefe de Vogue, Anna Wintour.