Nuevas elecciones

Las elecciones municipales y regionales de octubre próximo servirán, entre otras cosas, como una medición de fuerzas sobre los avances y retrocesos de las actuales organizaciones políticas en escena. Nos referimos a los partidos políticos que fueron derrotados en los comicios presidenciales, los movimientos regionales, así como el partido Perú Libre de Vladimir Cerrón y acaso también el Partido Magisterial y Popular del presidente Pedro Castillo (si consigue inscribirse).

Castillo y Perú Libre tienen el desafío de ganar en la mayoría de alcaldías y gobiernos regionales para afianzar su respaldo popular que fue puesto en entredicho por la oposición en el último proceso electoral (su real votación fue de 19.11% y el resto fue el voto contra Keiko Fujimori). Algunos críticos no consideran casual que el gobierno haya designado como prefectos a personas vinculadas al mandatario a través del sector magisterial.

Es un enigma la acogida que tendrán esta vez los movimientos regionales. Hayuna experiencia negativa con muchas autoridades municipales y regionales que están involucradas en actos de corrupción y malversación de presupuestos públicos, lo cual se repitió con dineros destinados a combatir la pandemia y apoyar a los sectores más vulnerables.

Los precandidatos a la alcaldía de Lima apenas asoman en los sondeos de opinión, ya que aún es temprano para saber quién se perfila con fuerza para ocupar el sillón municipal.

Por ahora están listos 11 partidos nacionales y 169 movimientos regionales. Hay en proceso de inscripción siete partidos (entre ellos el Frepap, Nuevo Perú de Verónika Mendoza y el Partido Magisterial y Popular) y 33 movimientos regionales.