Digital: la economía #COVID19

Aunque hay consenso sobre la época negra que le toca asumir a la economía peruana en 2020, siendo una disrupción pura y dura como es el #COVID19 también era esperable que acelere la asunción de modelos de negocio digitales. Esos modelos tienen que cubrir la brecha existente entre oferta y demanda, creada por el “signo de estos tiempos”: distanciamiento social. Y la solución se llama comercio electrónico, economía de plataformas.

Si bien, la cara más evidente de esa disrupción será el reparto a domicilio de bienes y servicios (delivery), aparecen múltiples oportunidades. El techo de crecimiento de este sector es enorme para el Perú, considerado un mercado pequeño en estas artes. Y no solo respecto del mercado interno. Las oportunidades se dirigen a las exportaciones con el objetivo de cumplir despachos que no podrá cubrir China, fortalecer la balanza comercial con países de la región y reducir costos por uso de combustibles y fletes marítimos.

En Latinoamérica, la previsión de crecimiento de comercio electrónico al cierre de 2019 alcanzó un 69% (Ecommerce Report). Los valores más altos los tenían entonces Uruguay, con un 88% de penetración; seguido de Costa Rica, 85%; y Argentina, 82%. ¡El techo para el Perú es enorme! ¿Qué hacer? Pedirle al Ministerio de la Producción y el de Comercio Exterior y Turismo que “dejen de afilar el lápiz” y replanteen ya mismo un shock de acciones para relanzar la llamada “Hoja de Ruta Nacional de Economía Digital”. Lo digital es el “respirador artificial” que les salvará la vida a múltiples comercios. Y de toda gama y tamaño.