Sandra Urquia, peruana en Israel, informó que había planificado su boda religiosa junto a su pareja para el 25 de octubre del presente año; sin embargo, lo tuvo que suspender debido a que Israel declaró el país en estado de guerra ante los ataques de Hamás, desde Gaza. Asimismo, informó que se encontraba en Barcelona cuando empezó el conflicto, pero tuvo que regresar a su hogar y continuar con sus actividades programadas en Israel.
"Hicimos la boda civil en Perú y nos tocaba hacer la boda religiosa acá dentro de dos semanas. Teníamos la boda para el 25 de octubre, pero lamentablemente con todo lo que está pasando no creo que haya algo de alegría para poder hacer la boda. Es muy triste", informó la compatriota Urquia.
"Yo estuve en Barcelona cuando pasó todo esto, pero igual tenía el vuelo para venir. Vine, pero uno no se imagina la magnitud de lo que está pasando. Llegué y había bombas en el aeropuerto. Esperamos que las cosas mejoren", añadió.
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Asimismo, indicó que ella no se imaginó encontrarse con una situación que pone en peligro a todos los ciudadanos que residen en Israel y que impide a las personas acudir a sus trabajos por temor a regresar sin vida a sus casas.
"La gente no está trabajando. La gente no está yendo a trabajar. No se reúnen. Las tiendas y los centros comerciales están cerrados, pero las farmacias, los hospitales están abiertos", señaló Urquia.
"Aquí la situación es muy incierta, no se sabe lo que va a pasar. Gracias a Dios, en Tel Aviv, que es la parte del centro, está más tranquilo, pero igual estamos con el temor y el miedo de que pueda pasar algo. Suenen las alarmas y tenemos que correr a los bunkers. Yo vivo con mi esposo, vivo en Israel hace cinco años", agregó.
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También, indicó que las autoridades de Israel y peruanas que se encuentran en dicho país aconsejan a los ciudadanos tener lo necesario para sobrevivir, ya sea comida, linternas y más.
"Lo que el Estado está diciendo es que nosotros tenemos que estar preparados para cualquier cosa. Tenemos que tener comida, linternas, los celulares bien cargados, porque si pasa algo tenemos que ir a un refugio (...). Durante la mañana fui a llevar cosas para niños y en Asdod, en donde yo fui, la gente está viviendo en los bunkers, en lugares más cerrados", señaló.