Hijo del acusado por narcotráfico Orlando Sánchez Paredes aseguró que Alan García presionó para que su empresa vendiera un yacimiento minero valorizado en mil millones dólares, que benefició a la minera canadiense Sulliden.,Alfredo Sánchez Miranda, hijo del acusado por narcotráfico Orlando Sánchez Paredes, denunció al expresidente Alan García por presionar a su empresa para beneficiar a la minera canadiense Sulliden, durante su gobierno. De acuerdo las declaraciones de Sánchez Miranda en Cuarto Poder, Alan García intercedió por la empresa minera, a fin de que la empresa de su familia entregue un yacimiento valorizado en mil millones de dólares de una mina que compraron en 2003. PUEDES VER Alan García intenta cuestionar reforma judicial pero tuiteros lo 'trollean' La empresa Comarsa, de Sánchez, compró acciones de la mina Algamarca en Cajamarca, que tenía como opción la venta de las concesiones a la empresa Sulliden por un tiempo determinado. Comarsa aceptó tales acuerdos, sin embargo, según el primogénito de Sánchez Paredes, Sulliden incumplió en el plazo fijado y luego quiso retomar el trato. La disputa por el yacimiento llegó hasta el Poder Judicial y cuando estaban por ganar el juicio, el expresidente Alan García convocó una conferencia de prensa, el 28 de enero de 2008, en la que aseguró que perseguiría a la familia Sánchez Paredes por un presunto lavado de activos. Tras la conferencia, el Gobierno de García les obligó a vender el yacimiento, valorizado en US$2 mil millones, a solo US$50 millones, el cual finalmente fue vendido en 2015 por US$ 1,000 millones. Sánchez Miranda aseguró que detrás de esta investigación existían intereses económicos y estaban involucrados personajes cercanos a Alan García. “Él salió en conferencia de prensa a decir que nos había descubierto y que gracias a su conferencia se inició una investigación (…) Lo que no dice García es que detrás de su conferencia de prensa había intereses económicos, la disputa de una mina donde los personajes que actuaban alrededor era su propia gente”, sostuvo. Sánchez Miranda reveló que su familia logró llevar el caso a la Alan García, donde se han recopilado diversos testimonios que demostrarían una supuesta presión por parte del gobierno de García a favor de Sulliden. Uno de estos es el del expresidente de la Corte Superior de Lima, César Vega Vega, quien en declaración jurada dijo que había recibido una advertencia del abogado Alberto Quimper para que no dé un fallo favorable a los Sánchez Paredes en la disputa por el yacimiento. “Durante su visita a mi oficina, el abogado Quimper me dijo que tuviera cuidado con el caso Sulliden porque Alan García había ordenado una investigación a fondo sin considerar a quién pudiera atrapar a sanciones penales, y que él no quería que yo sufriera las consecuencias de estar de acuerdo con los Sánchez en el caso Sulliden. Comprendí claramente que esas declaraciones configuraban una amenaza contra mi independencia judicial, y sin más eché a Alberto Quimper de mi oficina”, puntualizó.