Medicina que cura la enfermedad, pero no mantiene la salud

Eduardo Ugarte y Chocano Periodista,El que la actividad médica está orientada a curar enfermedades y no a mantener la salud es la conclusión principal de la conferencia “Influencia del medio ambiente en la persona (disruptores endocrinos)”, que este martes 04, en la víspera del Día de la Medicina Peruana y como parte de los actos celebratorios, dictará el médico Jorge Ballón Echegaray, a las 11:00 horas, en el paraninfo Eleazar Guzmán Barrón de la Facultad de Medicina de la Unsa. Esta conclusión está basada en estudios como el de la conferencia, que demuestran que conociendo las causas de ciertas enfermedades o trastornos en la salud, no interviene el Estado para evitarlas y solo desarrolla políticas de cura. Así, en la anunciada conferencia, para público en general y con ingreso libre se hará saber que los niños pueden sufrir de cáncer de próstata o de tiroides, y déficit de atención e hiperactividad, causados por productos para el hogar, para el cuidado personal e incluso los alimentos y el agua, que son algunas de las fuentes de exposición a sustancias químicas, conocidas como disruptores endocrinos, que pueden provocar una acumulación de toxinas en el cuerpo. Son 12 las peores sustancias químicas disruptoras de hormonas con las que se está en contacto regularmente. Estas sustancias son similares en estructura a las hormonas sexuales naturales como el estrógeno, por lo tanto interfieren con sus funciones normales y se encuentran en pesticidas o productos como el plástico, que acaba de ser prohibido en el uso de vajilla y cubiertos, y su entrega en supermercados en la Unión Europea; agregando que en el Reino Unido se han incluido los cosméticos con microesferas. Pero, en actitud calificada como timorata, en España no entregarán bolsas de plástico, mas sí las venderán. Algo similar sucede en nuestro país, pues el proyecto del MINAM para reducir el uso de las bolsas de plástico ha sido cambiado en este gobierno, optando por reciclarlas. Abonando a la conclusión de la falta de una política de salud que evite las causas de las enfermedades, debemos recordar que el próximo mes se cumplen tres años en que se dio la Ley de Protección contra la Radiación Solar y hasta ahora no se aplica por falta de reglamento. O, con más tiempo aún, la Ley de Alimentación Saludable está en el limbo, pues en su reglamento no se establece advertencias sobre el azúcar adicionada, sodio, grasas saturadas y trans que deben figurar en las etiquetas. Si las leyes no evitan productos con toxinas y han reducido la función preventiva de la Medicina a solo curar enfermedades, como usuarios responsables deberíamos evitarlos, pero para eso hay que conocerlos. Ahí la necesidad de asistir a la citada conferencia por su importancia y alarmante advertencia. &clubs;