Luis Álvarez
La cotidianeidad de un entrenamiento de fútbol fue interrumpido desde los aires ayer en Urubamba (Cusco), cuando un helicóptero del Ejército aterrizó en el campo donde entrena la reserva de Cienciano.
Era cerca del mediodía, cuando el aterrizaje de la nave se hizo inminente. Ante ello, los jóvenes futbolistas se resguardaron cerca de las graderías del estadio de Nogalpampa (Urubamba).
Del aparato descendieron dos oficiales del Ejército. Uno, que se identificó como el capitán Juárez, dijo que formaban parte de la comitiva de seguridad del presidente Martín Vizcarra, quien llegará mañana a la zona para inaugurar un puente.
El entrenador del primer equipo de Cienciano, Mario Grioni, se hallaba al momento del curioso incidente. Consideró que debieron ser notificados del aterrizaje. “No sabíamos nada, estaban los chicos jugando y no entendíamos nada. Por suerte, no pasó nada”, expresó el entrenador argentino.
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Por la tarde, el primer equipo de Cienciano entrenó en el mismo estadio de Nogalpampa, sin contratiempos.
Uno de los jales de Cienciano, Luis Trujillo, dijo sentirse cómodo y fortalecido por el ambiente que se respira en el Valle Sagrado de los Incas, donde el equipo realiza la pretemporada. “Es un hermoso lugar, tenemos todas las comodidades para reposar después de un duro trabajo”, aseveró.