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¿Qué pasó con cine Susy, sala que proyectaba películas para adultos en SJM y se volvió un prostíbulo?

Por varios años, el icónico cine Susy, del distrito de San Juan de Miraflores, solía ser un espacio para ver películas clásicas. Sin embargo, con el paso del tiempo, en sus salas se comenzó a proyectar cintas para adultos y a ejercer la prostitución.

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El cine Susy de San Juan de Miraflores abrió sus puertas en 1964. Foto: composición LR/Municipalidad de SJM/Facebook

Uno de los puntos más populares e icónicos en la historia del distrito de San Juan de Miraflores es sin duda alguna el cine Susy. Este espacio abrió sus puertas en 1964 y en poco tiempo se volvió uno de los espacios más concurridos por personas de la zona y de otras localidades de Lima para disfrutar de las cintas clásicas y de las películas para adultos que se proyectaban. Sin embargo, con el transcurso de los años, se volvió un espacio en el que se ejercía la prostitución de manera clandestina.

Este punto de San Juan de Miraflores también fue conocido por albergar en sus instalaciones salas de juegos de azar y tragamonedas. Es por ello que te contamos qué sucedió con el popular cine Susy.

¿Cuál es la historia del cine Susy de San Juan de Miraflores?

El cine Susy abrió sus puertas al público en 1964. De acuerdo con un artículo publicado por el arquitecto Diego Aparicio, este lugar, ubicado en la avenida San Juan 1204 de la localidad de Ciudad de Dios, se posicionó como uno de los principales cines de barrio del referido distrito limeño.

A finales de la década del 70 e inicios de los 80, este empleó la dinámica de cine continuado, en el cual las personas podían ingresar a otra función luego de haber visto una película, principalmente a aquellas cintas dirigidas a un público adulto. Sin embargo, el mecanismo no funcionó, por lo que se dejó de utilizar.

En diálogo con el arquitecto Aparicio para el mencionado artículo, Carlos Hurtado, quien fuera dueño del cine Susy, señaló que, en los años 80 y 90, la “industria del cine” tuvo una caída, la cual afectó a la economía del establecimiento. Asimismo, el conflicto armado que se vivía en el interior del país y en la ciudad de Lima generó temor en la población de acudir a este tipo de lugares.

El cine Susy fue punto de encuentro de varias familias por varios años, pero luego comenzó a proyectar películas para adultos. Foto: Revista Devenir/UNI/Diego Aparicio

“Durante esos años, la industria del cine se vino abajo. De un momento a otro, los espectadores se vieron obligados a dejar de asistir a las salas, no solo por la llegada de la TV a color (...), sino también por el temor a los coches bomba y los apagones constantes que se vivían en esta parte de Lima. Fue un periodo de bastante temor en el cual nosotros buscábamos la manera de permanecer en el espacio”, señaló Hurtado.

Decadencia del cine Susy de San Juan de Miraflores

Fue así que se empezó a emitir funciones a medianoche de películas para adultos. Como en aquella época aún los VHS y DVD no estaban en la mayoría de casas peruanas, las personas acostumbraban pagar para ingresar a al cine Susy y ver este tipo de contenidos. Sin embargo, paulatinamente se volvió un punto inseguro y de mal aspecto.

En 1992, se optó por arrendar la principal sala del cine a una compañía denominada Newport. De esta manera, dicha área se convirtió en una sala de juegos de azar y de tragamonedas.

En los años siguientes, el famoso cine de barrio fue objeto de cuestionamientos, ya que incluso se llegó a conocer que en su interior se ejercía la prostitución de manera clandestina.

Este lugar fue conocido como un cine de barrio debido a que muchas familias llegaban hasta sus salas para disfrutar de películas. Foto: composición LR/

¿Qué pasó con el cine Susy?

En 2020, el cine Susy fue intervenido por personal de fiscalización y de la Subgerencia de Gestión de Riesgo de Desastre de la Municipalidad de San Juan de Miraflores, que clausuró de forma definitiva el establecimiento. Esto debido a que presentaron a las autoridades municipales documentos adulterados y falsos. Además, se pudo conocer que, en los ambientes en los que se proyectaban películas pornográficas, también se ejercía la prostitución.