Rusia es uno de los países con mayor cantidad de armas nucleares. El país que lidera Vladímir Putin posee 6.255 ojivas de las 12.700 que existen en todo el mundo. Si bien tienen un gran poder destructivo, la más poderosa de todas fue construida cuando aún era la Unión Soviética y se denominó la Bomba del Zar o Tsar Bomba, cuya prueba en 1961 fue considerada la explosión más grande creada jamás por el hombre.
Durante la guerra entre Rusia y Ucrania, el presidente Vladimir Putin puso en ‘alerta máxima’ a sus fuerzas de disuasión nuclear, y ello trajo a la mente de miles de internautas el desarrollo de esta gigantesca bomba de hidrógeno, de la cual se calcula tenía un poder destructor 3.300 veces mayor al de la bomba lanzada sobre Hiroshima.
La RDS-220, conocida como Bomba del Zar, es la mayor bomba de hidrógeno jamás construida, y su fuerza se calcula en 50 millones de toneladas de explosivos convencionales. Fue desarrollada por la Unión Soviética entre 1955 y 1961, en el marco de la Guerra Fría con Estados Unidos. Tenía 8 metros de largo, 2,6 metros de diámetro y más de 27 toneladas de peso.
La bomba, considerada un arma de último recurso capaz de destruir ciudades, se hizo realidad gracias al deseo del primer ministro Nikita Khrushchev de hacer temblar al mundo con el poder de la tecnología soviética.
Réplica de la Bomba del Zar, exhibida en una exposición en Moscú. Foto: AFP
El plan original de Khruschev era crear un arma de 100 megatones, muy superior a cualquier otra antes creada por EE. UU., pero los científicos rusos temían que la lluvia radiactiva fuera demasiado destructiva, por lo que el producto final terminó siendo menos poderoso de lo inicialmente previsto.
La prueba de la Bomba del Zar se realizó un 30 de octubre de 1961, en el remoto archipiélago ruso de Novaya Zemlya, ubicado en el Océano Ártico. El arma era trasladada al campo de pruebas por un avión pintado de blanco brillante para reflejar el efecto de la radiación térmica.
El avión iba acompañado de otro que se encargaba de grabar las imágenes. Ambos tenían una posibilidad del 50% de sobrevivir a la explosión, según la BBC. El dispositivo fue lanzado con un paracaídas para que llegue a la altura deseada de 4.000 metros sobre el suelo, de forma que ambas aeronaves tuviesen tiempo de volar a una distancia segura.
La Bomba del Zar llegó a su destino con ayuda de un paracaídas para dar tiempo de escape a los aviones. Foto: captura de Rosatom
A las 11.32 a. m. de Moscú, la RDS-220 hizo explosión. Se formó una bola de fuego de 8 kilómetros de ancho que fue empujada hacia arriba por su propia onda expansiva. La nube en forma de hongo alcanzó los 64 km de altura y estuvo cerca de los 100 km de ancho. El material en video fue desclasificado en 2020 con ocasión del aniversario 75 de la industria nuclear rusa.
El impacto de la explosión hizo que el avión cayera 1.000 m, pero se recuperó antes de aterrizar. A 55 km de la zona cero, todas las casas de la aldea de Severny fueron destruidas. A cientos de kilómetros, las casas se hundieron, los techos colapsaron, y las puertas y ventanas quedaron destrozadas.
La explosión de la Bomba del Zar es equivalente a unos 50 megatones de TNT, según se aprecia en el video. En comparación, la bomba Castle Bravo –la más poderosa de Estados Unidos en aquel entonces- era de 15 megatones, y la Little Boy, lanzada sobre Hiroshima en 1945, era de 15 kilotones.
Este temible amamanto tuvo muchos nombres técnicos, como Proyecto 27000, Producto Código 202 y RDS-220. Sus proporciones la hacían muy difícil de manejar y tampoco podía cargarla ninguno de los aviones que tenía la Unión Soviética durante su apogeo.
Originalmente, se suponía que la bomba desatara 100 megatones, pero los científicos temieron la precipitación radiactiva y sus efectos potenciales en la salud humana, y por eso decidieron usar tres capas de plomo en lugar de tres capas de uranio para reducir la explosión a la mitad.
Así eran las dimensiones de la Bomba del zar Foto: Radio Free Europa
Las bombas atómica fueron usadas en combate durante la Segunda Guerra Mundial. Las nucleares o termonucleares solo fueron probadas. Por ejemplo durante la Guerra Fría, como la Bomba del Zar que se lanzó el 30 de octubre de 1961 y es considerada la más devastadora.
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De acuerdo con información del portal La Sexta de España, Rusia cuenta con los siguientes recursos militares:
De acuerdo con la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), se trata de una sustancia química que se utiliza para generar intencionalmente daño o la muerte por medio de sus propiedades tóxicas.
En este grupo también se encuentran las “municiones, dispositivos y otros equipos diseñados específicamente para convertir en arma las sustancias químicas tóxicas”.
La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) detalla que la principal diferencia entre las armas químicas y las armas biológicas es que las primeras utilizan sustancias para producir daño o incluso la muerte mediante sus propiedades tóxicos. En cambios, las segundas utilizan hongos, bacterias o virus para generar daños.