Hoy, 2 de marzo de 2022, se celebra el Miércoles de Ceniza, una tradición cristiana que marca el inicio de la Cuaresma, un periodo de 40 días que tiene como objetivo exhortar a los creyentes a reflexionar en sus acciones y mejorar su modo de vida conforme a los principios religiosos. Conoce, a continuación, el origen de esta celebración y por qué es tan importante.
Cabe resaltar que al ser el Miércoles de ceniza el inicio de la Cuaresma, y la cuaresma el tiempo de preparación para la Pasión de Cristo, la Iglesia católica pide a sus feligreses que oren y realicen ciertos sacrificios, como el ayuno y la abstinencia. Estos se realizan tanto el Miércoles de Ceniza como todos los viernes posteriores hasta el Domingo de Resurrección.
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Como ya mencionamos líneas arriba, el Miércoles de Ceniza marca el inicio de la Cuaresma, un periodo de 40 días previo a la celebración de la Pascua y la Semana Santa. Es decir, que esta celebración abre paso a una de las etapas más relevantes en la tradición cristiana: La semana Santa.
El Miércoles de Ceniza es una festividad que nos prepara para la Semana Santa. Foto: vatican
El Miércoles de Ceniza es una tradición que tiene origen hebreo, ya que los judíos, cuando cometían algún pecado o se preparaban para una fiesta importante, se cubrían con cenizas como signo de su deseo de acercarse a Dios. Con ello, querían simbolizar el arrepentimiento, pues entendían las cenizas como signo de la fragilidad del hombre y de la brevedad de la vida.
En ese sentido, el cristianismo cogió esta tradición desde sus inicios, aunque con pequeñas diferencias, ya que al comienzo los fieles que se imponían las cenizas eran solo los pecadores públicos que durante la Cuaresma se preparaban para recibir la reconciliación en la Pascua. Sin embargo, fue en la Edad Media cuando esta práctica se extendió al resto de los cristianos y se estableció en el mismo día de la Cuaresma.
Esta festividad es importante porque nos permite recordar nuestro origen a través de las cenizas, ya que este elemento tiene un sentido simbólico de arrepentimiento, humildad y penitencia, además, nos ayudan a mirar en nuestro interior.
El Miércoles de Ceniza es un tiempo de reflexión y oración. Foto: EFE
Esta mirada a la interioridad de uno, de reconocer los propios errores y querer rectificarlos, entra en la dinámica de las dos palabras claves de la cuaresma. Al reconocer nuestros pecados, nos arrepentimos y al querer cambiarlos, nos convertimos.
En ese sentido, esta festividad permite reconocer que somos débiles y que necesitamos de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús para poder llegar a vivir junto a él en el Reino de los Cielos.
La Iglesia Católica menciona que su principal función es recordar el inicio de la cuaresma. De igual manera, explica que el gesto de cubrirse con ceniza tiene sentido de reconocer la propia fragilidad y mortalidad que necesita ser redimida por la misericordia de Dios.
Los católicos acuden a las iglesias para que les pongan la señal. Foto: cuartoscuro