Poco antes de dejar la presidencia, el entonces jefe de Estado ecuatoriano firmó un decreto que beneficia principalmente a condenados por narcotráfico., El expresidente de Ecuador Rafael Correa emitió hace poco, cuando aún estaba en el poder, un decreto que permitirá que unos 3000 presos salgan del sistema penitenciario, todos ellos sentenciados por vínculos con el narcotráfico. El Decreto Ejecutivo 1440, firmado por Correa el 23 de mayo de este año, establece la “rebaja de 360 días a los internos sentenciados por un delito que tenga una pena máxima de cinco años y hubiesen cumplido el 30 % de la condena”. PUEDES VER Lenín Moreno le pide a Assange no intervenir en asuntos de Ecuador De acuerdo con el medio local Expreso, además se concede el indulto presidencial a los sentenciados por tráfico ilícito de sustancias estupefacientes y psicotrópicas, que hubiesen intentado ingresarlas o sacarlas del país. Aquellos que padezcan “enfermedades catastróficas en etapa terminal” también son los beneficiados. De acuerdo con Ledy Zúñiga, secretaria de Drogas y exministra de Justicia, el sistema penitenciario ecuatoriano tiene unos 30 000 privados de la libertad. De ellos alrededor de 4000 están detenidos por delitos relacionados con el 'microtráfico'. La determinación de la cifra final de beneficiados con el indulto está a cargo del Ministerio de Justicia. Su titular, Rosana Alvarado, informó que a fines de junio saldrán los primeros favorecidos de los Centros de Rehabilitación Social (CRS) del país”. Frente a algunas críticas contra este decreto, el Gobierno de Lenín Moreno, sucesor de Correa, explicó que van a iniciar un proceso riguroso para identificar a quienes se beneficiarán y evitar que sean víctimas de engaños. Dependerá de "cómo se interpreta el decreto de indulto para proyectar el número de beneficiarios", indicó el defensor Público, Ernesto Pazmiño. En tanto, la Secretaría Técnica de Drogas hará un seguimiento a las personas que sean indultadas. Ofreció apoyo para que no existan casos de reincidencia o que vuelvan a ser presa de las bandas relacionadas con drogas.