Desarticulan una presunta red dedicada al tráfico de camas UCI en Arequipa
Timador. Un bachiller de medicina es acusado de cobrar entre 3 mil a 4 mil soles a 7 familias que buscaban salvar a sus parientes. Solo a uno habría ayudado a conseguir una cama.
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En medio de la segunda ola donde no es fácil encontrar camas UCI en los hospitales de la ciudad de Arequipa, una presunta red criminal habría lucrado con el dolor de la gente.
Ayer, en un megaoperativo simultáneo en más de cuatro puntos, los agentes de la División de Alta Complejidad (Diviac), detuvieron a 3 presuntos integrantes de la banda “Indolencia Covid”.
Se trata de Luis Enrique Cerpa Gonzales, quien era bachiller en medicina y sería el cabecilla. Según los audios que la policía tiene en su poder, esta persona se encargaba de captar personas que buscaban una cama de Unidad de Cuidados Intensivos. Les pedía de 3 mil a 4 mil soles.
La investigación surgió hace dos meses atrás, cuando un testigo protegido denunció ante la Fiscalía Anticorrupción, a cargo de la fiscal Marita Cueva, que le habían cobrado 3 mil soles para acceder a una cama UCI en el hospital EsSalud Carlos Alberto Seguín Escobedo.
Con esta denuncia, se interceptó teléfonos y se pudo detectar que se cobró a otras seis personas, pero no les dieron camas UCI como prometieron.
Por esta razón, la investigación que se realiza es por tráfico de influencias simuladas y están viendo si puede ser también por estafa agravada.
La Fiscalía obtuvo la detención preliminar por 7 días, tiempo en el que harán varias diligencias como la de corroborar los audios con los implicados.
Se supo que el profesor Julio Pilco que trabaja en Lluta (Caylloma), es el segundo detenido. A él se le acusa de captar a tres víctimas y contactarlos con el bachiller. Se desconoce si sabía lo que hacía Cerpa o también fue sorprendido.
El tercer intervenido es un trabajador de Inca Tops, de apellido Manrique, quien se habría contactado con el bachiller para que le otorgue un certificado de descanso médico por COVID-19.
Este documento había sido firmado con los sellos del hospital Goyeneche, cuyo médico también fue detenido, pero a los minutos quedó libre al cotejarse que su firma fue falsificada.
Otro presunta modalidad de esta red, sería el cobro de 35 soles por día a tres familias para atender “bien” a sus pacientes. Para ello, el bachiller que tenía a sus promociones de estudios trabajando en diferentes hospitales, les llamaba para saber la situación del paciente y con ello hacia más creíble su influencia o acceso en los nosocomios. Mañana se le tomará la declaración a todos ellos.
