¿Sabías que el estadio Monumental y Matute fueron diseñados por la misma persona?
Conoce más sobre Walter Lavalleja Sarriés, el uruguayo que diseñó los estadios de los equipos más importantes del Perú: Alianza Lima y Universitario de Deportes.
Walter Lavalleja Sarriés Cabrera es un nombre desconocido para muchos y en realidad pocos saben el papel fundamental que este uruguayo ha tenido en la historia del fútbol peruano. Ingeniero de profesión, Lavalleja Sarriés fue el hombre que diseñó los estadios de Alianza Lima y Universitario de Deportes. Como lo lee, el profesional charrúa fue el encargado de idear la construcción de los escenarios deportivos de los equipos con más tradición del balompié doméstico.
¿Quién fue Walter Lavalleja Sarriés?
Lavalleja Sarriés nació en Uruguay, el 19 de abril de 1927. En 1961, a la edad de 34 años, fue becado para hacer un posgrado en Administración de Empresas en la Universidad Getulio Vargas de Brasil. Para ese entonces, ya poseía el título de ingeniero, obtenido en su país de origen.
En tierras brasileñas, el uruguayo decidió especializarse en Infraestructura Deportiva y Comercial. En ese contexto, pasó a formar parte de Brasiliar, empresa que se encargó de la construcción del Estadio Beira Rio, de Porto Alegre. Esta fue su primera experiencia en la edificación de un escenario deportivo.
Sarriés se encargaba de elaborar el plan de construcción: desde su diseño hasta el aspecto financiero. Esto incluía la edificación y comercialización de palcos que permitirían el autofinanciamiento de la obra. Luego, desde Perú se dirigieron a Brasil para buscar especialistas para que Brasiliar se encargara de la construcción del estadio de Alianza Lima.
Estadio Alejandro Villanueva. Foto: Alianza Lima
Con esta oferta, el mencionado arquitecto decidió mudarse al Perú junto con su familia. Tras culminar la obra, Sarriés dejó Brasiliar y fundó la compañía Progreso International. De allí en adelante estuvo relacionado en la construcción y remodelación de otros colosos deportivos, como el Monumental de Guayaquil, George Capwell (también de Guayaquil), Hernando Siles de La Paz y el Estadio Azteca.
El método de trabajo de Progreso International era asociarse con profesionales de cada ciudad y en conjunto llevar a cabo la edificación del escenario deportivo. En ese contexto, llegó la propuesta de Universitario de Deportes para alzar el estadio Monumental. Para concretar dicho proyecto, Sarriés se asoció con la constructora Gremco.
El Monumental de Lima es uno de los últimos proyectos que encabezó Sarriés con su empresa. Lamentablemente, el arquitecto de dos de los principales escenarios deportivos del Perú falleció en Montevideo, el 17 de febrero de 2015, a la edad de 87 años.
Construcción del Alejandro Villanueva
Su primer nombre fue Estadio Alianza Lima hasta el año 2000. En dicha fecha, se decidió llamarlo Alejandro Villanueva. La construcción del mismo se anunció el 11 de abril de 1965 gracias a que el presidente de aquel entonces, Manuel Odría, donó el terreno.
En mayo de 1969, inició la primera fase del proyecto y, cinco años después, fue inaugurado con un torneo amistoso denominado Señor de los Milagros. Así, el escenario deportivo de La Victoria —con capacidad para 55.000 espectadores— se abría al público un 27 de diciembre de 1974.
¿Cómo se construyó el estadio Monumental?
Estadio Monumental de Ate. Foto: Universitario de Deportes
Ubicado en la cuadra 77 de la avenida Javier Prado Este, el estadio Monumental se inauguró el 2 de julio de 2000. El 16 de enero de 1991, se colocó la primera piedra y el terreno donde se construyó se compró el 18 de octubre de 1994. Cabe mencionar que es el segundo campo de Sudamérica con mayor capacidad.
Cuenta con un aforo de 80.093 espectadores, de los cuales 58.577 corresponden a las cuatro tribunas y 21.516 a los palcos. En 2015, fue considerado como uno de los 100 mejores recintos del mundo por la revista inglesa FourFourTwo (puesto 44). En tanto, en 2017, el diario As lo colocó entre los 10 estadios míticos de Sudamérica. El 23 de noviembre de 2019 fue escenario de la primera final de la Copa Libertadores de América.
