
Los ciudadanos suelen tener diferentes razones para blanquear sus dientes, siendo la más común la estética: una sonrisa radiante. Ante esta necesidad, por internet se ha difundido diferentes métodos caseros para blanquear los dientes. Entre los más populares se encuentra la versión de que el jugo de limón es útil para blanquear y eliminar las manchas de los dientes. Sin embargo, dicho método tiene "Graves consecuencias en la salud bucal de las personas".
En Facebook se difundió un video que recomienda mezclar pasta dental con zumo de limón para eliminar manchas en los dientes y promete que "verás tus dientes brillar". La publicación, que difunde información nociva para la salud de las personas superó los 3,9 millones de reproducciones, obtuvo más de 38 000 reacciones y fue compartida en más de 4500 ocasiones.

Según la investigación científica “Comparación in vitro de remedios naturales para blanquear los dientes y sistemas profesionales de blanqueamiento dental”, se evaluaron 90 dientes extraídos sin caries, que fueron limpiados y divididos en seis grupos: bicarbonato de sodio, carbón activado, fresas, jugo de limón, pasta dental y un blanqueador doméstico. Tras medir el blanqueamiento mediante el tono del esmalte de cada muestra, los investigadores observaron que el grupo tratado con jugo de limón mostró un color blanco escarchado, pero también evidenció un efecto poroso en el esmalte debido a la desmineralización de esta capa, que es la más dura y protectora del diente.
El estudio advierte que, aunque el limón puede producir un blanqueamiento inicial, si se aplica directamente en los dientes dentro de la cavidad oral, la acidez aumenta la microporosidad del esmalte y facilita la tinción, es decir, la aparición de manchas por la mayor absorción de pigmentos provenientes de alimentos, bebidas, tabaco u otros elementos.
En esa misma línea, en una entrevista para La República, la cirujana dentista Xiomara Vásquez Espinoza explicó que el limón, más que aclarar, “destruye la primera capa del diente, que es el esmalte”. Indicó que esta erosión puede dar la impresión de un blanqueo momentáneo porque el esmalte pierde minerales, refleja más la luz y, al ser una sustancia ácida y abrasiva, el limón elimina algunas manchas superficiales. Sin embargo, advirtió que, al desgastarse esta capa protectora, queda expuesta la dentina, que es naturalmente más amarillenta. “Supuestamente, las personas quieren aclarar el diente, pero al destruir la primera capa, en realidad están haciendo todo lo contrario”, puntualizó Vásquez.
A ello se suma el estudio “Evaluación topográfica y radiográfica de la erosión dental. Parte II: efecto de los jugos de frutas cítricas en la dentición humana”, en el que dientes humanos adultos fueron expuestos de manera periódica a jugos cítricos durante 20 semanas. Los investigadores concluyeron que el jugo de limón provocó el daño más severo: pérdida de esmalte, reducción de su altura en distintas zonas del diente y una erosión significativa —es decir, la destrucción del tejido dental por acción de sustancias químicas— en comparación con la naranja y el pomelo.
La cirujana dentista advirtió que una de las principales consecuencias del uso de limón en los dientes es el aumento del riesgo de caries. Explicó que las bacterias que causan esta enfermedad se alimentan de los restos de comida y azúcares, y producen ácidos que desgastan el esmalte. Al añadir un ácido externo, como el del limón, se potencia ese efecto y se facilita la aparición de caries. También señaló que el contacto frecuente con el limón puede generar sensibilidad dental e irritar las encías debido a su pH muy ácido.
Si bien el jugo de limón puede dar la impresión de blanquear los dientes en un primer momento, la evidencia científica demuestra que su alta acidez desmineraliza el esmalte, lo vuelve poroso y facilita la aparición de manchas. Con el tiempo, este desgaste expone la dentina -de tono más amarillento- y aumenta la vulnerabilidad a la caries, la sensibilidad y la erosión dental. En consecuencia, el limón no es un método seguro de blanqueamiento, sino un elemento que a largo plazo puede dañar seriamente la salud bucal.
Por ello, la dentista Xiomara Vásquez recomendó otros métodos de aclaramiento dental más seguros, basados en el uso de peróxido de hidrógeno y peróxido de carbamida.