La forma de la barriga en el embarazo no determina el sexo del bebé
Especialistas en obstetricia y ginecología descartan esta información y aclaran que se trata de un mito. Además, la versión no está avalada por ningún reporte científico.
“Si la mujer durante su embarazo presenta una barriga puntiaguda, entonces es niño; y si es ovalada, niña”. ¿Has escuchado alguna vez estas afirmaciones sin ningún respaldo científico en tu entorno familiar? Seguramente que sí, por ello, en este artículo te explicamos por qué se trata de solo una creencia.
Ninguna forma de la barriga en el embarazo te dice el sexo del bebé
Consultadas por Verificador vía telefónica, tres especialistas coinciden en indicar que esto es un mito. La obstetra Mimi Rojas, decana del Colegio de Obstetras del Perú, aseguró que la detección del sexo se realiza mediante ecografías, también llamadas sonografías —que emplean ondas sonoras (ultrasonido) para producir imágenes de alguna zona en particular e interior del cuerpo—.
Dijo que para una mayor certeza se puede realizar en la semana 20 de la gestación, que, según información del portal estadounidense Medline Plus, es el “período de tiempo” que rige desde la concepción y el nacimiento del bebé y dura normalmente 37 y 42 semanas. La experta anotó que también se puede ejecutar entre las semanas 13 y 14, pero dependerá de algunas condiciones como del tipo del ecógrafo y la experiencia del profesional encargado del procedimiento.
“No solamente nos detecta el sexo, sino también podemos identificar tempranamente algún tipo de malformación (...) o algún tipo de enfermedades que podrían ser luego derivadas a un cambio en el bebé, como por ejemplo, el síndrome Down”, remarcó sobre las ecografías. Agregó que permite descubrir alguna afección relacionada con la madre, como la preeclampsia que, según un reporte de 2022 en Scielo, es la principal causa de la muerte materna en Perú.
Arguyó que estas sonografías se caracterizan por ser “medios no invasivos”, es decir, son inocuas y no ocasionan daño al bebé y a la madre y, además, son catalogadas “como parte inherente de atención prenatal”. “Ahora no se puede considerar ningún control de embarazo si es que no hay un seguimiento ecográfico (...) La ecografía fue creada desde hace años y ha ido avanzando con el tiempo. Ahora hay fotografías 3D, 4D, 5D, prácticamente en tiempo real (...) Ya podemos ver la carita del bebé, entre otras características”, detalló.
Una gestante se realiza una ecografía. Foto: Gerencia Regional de Salud de La Libertad.
Por su parte, Vicky Vásquez, ginecóloga-obstetra, alegó que, aunque haya “coincidencias”, todavía “no existe un estudio científico que determine si la forma de la barriga tiene relación con el sexo del futuro bebé”.
“El sexo del bebé se va desarrollando desde el inicio del embarazo, pero es a partir de las 15 semanas en que casi se completa el desarrollo y puede ser posible verlo por ecografía”, aseveró. Añadió que también a partir de las 10 semanas, a través de un “examen de sangre materna” (un método no invasivo) se puede saber esa información materna, como también “enfermedades y problemas genéticos”. “Incluso si el embarazo se produjo por tratamiento de fertilización in vitro es posible saber el sexo del embrión antes de implantarlo”, explicó.
Del mismo modo, la obstetra Aydee Alvis sostuvo que para saber el sexo del bebé se hace uso principalmente de las ecografías. Indicó que en otros países emplean el ‘examen de amniocentesis’ o ‘muestreos de vellosidades coriónicas (CVS)’, “pero eso se realiza cuando hay un riesgo relacionado con el sexo del feto”, es decir, son casos particulares, no se aplica de manera general. Además, como se constata en el reporte de 2022, estas últimas son técnicas invasivas, pero necesarias en un diagnóstico prenatal cuando hay alguna anomalía en los cromosomas.
La especialista aseguró que se puede determinar “a partir de las 12 a 13 semanas” del periodo de gestación, que, según ella, normalmente es de 40 semanas, pero precisó que la seguridad de la detección también estará sujeta al tipo de máquina, ecógrafo y pericia del especialista, quien realiza el estudio.
Dijo también que, aunque desde el inicio de la gestación se desarrolla el sexo, en las semanas 7 y 8 comienza “el proceso de formación de los órganos genitales” y en la semana 12 se encuentra listo para detectarse. Podemos saber el sexo antes de las semanas mencionadas, según la obstetra, si el embarazo se da por “inseminación artificial”. Indicó que mediante ese proceso se puede elegir el sexo del bebé e inclusive decidir si se quiere tener gemelos o trillizos.
Por otro lado, realizamos diferentes búsquedas en Google sobre la creencia en cuestión (1, 2 y 3), pero no detectamos ningún reporte científico o informe que cite pruebas para respaldar que la forma de la barriga permita identificar el sexo del bebé. Al contrario, encontramos varios textos que desmienten esta información, como el del portal de salud Health Line, del año 2019 y el del medio BBC, del 2013.
En esta indagación hallamos también un artículo de revisión de 2019, publicado en el Centro Nacional para la Información Biotecnológica en Estados Unidos. Ahí se hace hincapié que, a pesar de que hay otras herramientas tecnológicas que pueden detectar el sexo del feto, el “método principal” para determinarlo es el ultrasonido (ecografía).
¿Por qué algunas mujeres embarazadas presentan una barriga puntiaguda, ovalada o de otra forma?
Las obstetras concuerdan en sostener que no existe un único modelo de barriga y que su presentación se da por múltiples factores. “La forma depende en parte de la estructura anatómica de cada paciente y también de la forma del útero y la posición en que el bebé se encuentra dentro de este”, resumió Vicky Vásquez.
Por su parte, la decana del Colegio de Obstetras del Perú, sostuvo: “La forma que tiene el cuerpo de una persona es distinta entre una y otra (...) Algunas ingresan con un peso adecuado, unas con peso tal vez por debajo de lo normal, y otras con obesidad o con sobrepeso, que digamos es el común de las personas acá en el Perú”. También señaló que influye la actividad física dado que las mujeres que son deportistas pueden tener “unas piel mucho más elástica”. Mencionó, además, otros factores como la posición fetal y la edad de la madres, ya que también hay gestantes adolescentes.
A su turno, Aydee Alvis resaltó dos componentes principalmente que pueden tener influencia: la posición del feto y la contextura de la madre. Explicó que la forma ovalada y puntiaguda depende principalmente del primero. “Los fetos varones son un poco más grandes en cuanto a peso a diferencia del feto mujer. (...) Si determinamos la posición fetal adecuada para un proceso de parto, es una posición cefálica (cabeza abajo y nalgas arriba). Tiene una posición vertical, más acomodada, se acopla bien y tiene una posición fetal presentada para el momento del parto. Pero si vemos una posición transversal (...), esto hará que la barriga sea más globulosa. Igual si la presentación del feto es una posición podálica (tipo sentadito)”, aclaró.
Posiciones del feto: cefálica, transversal y en nalgas. Esta última presenta varios tipos, entre ellos, la posición podálica. Foto: composición / imágenes de la plataforma web ADAM.
Respecto al segundo factor, relató que cuando inicia la etapa de gestación, el cuerpo de la mujer presenta cambios. “El útero empieza a crecer debido al crecimiento fetal y este crecimiento hace que los órganos internos se desplacen y tomen otras posiciones (...). Si la paciente presenta sobrepeso, tendrá mayor ganancia de peso y encima va a tener más tejido adiposo. Esto tiende a hacer que la barriga sea más globulosa”, precisó.
Las especialistas también coinciden en que la forma de la barriga en el embarazo no es necesariamente un signo de alguna problemática. No obstante, Mimi Rojas y Aydee Alvis precisaron que sí es importante tener cuidado con el tamaño de la barriga según la semana de gestación, por lo que es necesario un seguimiento médico durante toda la etapa de embarazo.
Conclusión
Especialistas desacreditan esta información y señalan que se trata de un mito. Tampoco hay evidencia científica que respalde ello.
*Si deseas saber si una publicación en las redes sociales es cierta o falsa, puedes pedir a La República que compruebe la información. Envía tu solicitud al apartado Contacto o escríbenos al WhatsApp (+51 997 883 271).