El 24 de enero, luego de que la represión policial y militar del régimen de Dina Boluarte cobrara 46 fallecidos, la mandataria sostuvo ante la prensa extranjera que los ponchos rojos de Bolivia habían infiltrado armamento a Perú.
"Hay que determinar de dónde son estas balas (...) porque sabemos de manera extraoficial (que) por la frontera de Perú y Bolivia han ingresado armas (sic) letales llamadas dum dum, traídas por los ponchos rojos. Por eso digo, que la Fiscalía investigue".
Dina Boluarte durante la conferencia de prensa del último 24 de enero
El rumor del supuesto contrabando de balas dum dum desde Bolivia se extendió como un virus gracias a que lo vociferaron legisladores y medios. Su epítome se dio en la boca de la presidenta. Para su creación, necesitó de otros dos rumores: la supuesta intromisión de los ponchos rojos en Perú y el aparente uso de balas dum dum en Juliaca. Hasta la fecha, ninguno de sus divulgadores ha presentado pruebas.
El último 9 de enero, 18 manifestantes fueron asesinados en Juliaca durante enfrentamientos con la Policía, todos a causa de disparos de armas de fuego. En nueve de los cuerpos, se encontró proyectiles de armamento típico de la PNP: fusiles AKM, pistolas reglamentarias y escopetas de perdigones.
Horas antes de la tragedia, delegaciones de distintos distritos puneños desfilaron en la plaza de Armas de Puno. La de Pisacoma fue captada en el lugar alrededor de las 11.30 a. m., según una grabación en vivo de Puno Sin Filtro. Sus tenientes gobernadores portaban ponchos huayruros, vestimenta usual de las autoridades de la zona, además de chalinas blancas y sombreros negros. Minutos más tarde, Radio Onda Azul publicó un video en el que se aprecia más de cerca a las autoridades.
A las 12.34 p. m. el usuario El Paladín de la Justicia publicó en Twitter un extracto de este clip calificando de “terroristas” a las autoridades puneñas. Verificador ya desmintió este bulo.
Publicación viral en Twitter del usuario El Paladín de la Justicia. Foto: captura de Twitter
Los Ponchos Rojos, de acuerdo a AFP, es una organización boliviana originaria de Achacachi, provincia de Omasuyos, La Paz. Es considerada una milicia civil que ha apoyado muchas veces al partido de Evo Morales.
Esa noche, después de conocerse la tragedia en Juliaca, el congresista Héctor Valer le echó la culpa por los muertos a esta organización. Sin embargo, en conversación con Verificador, no pudo presentar prueba alguna de esta intromisión extranjera. Tan solo dijo poseer “informes confidenciales de inteligencia”.
Hasta antes de todos estos hechos, prácticamente ni las redes sociales (1, 2) ni el internet habían tocado el tema del supuesto intervencionismo de los ponchos rojos en Perú.
Horas antes de las declaraciones sin sustento de Valer, a las 5.35 p. m., la represión policial ya había cobrado nueve fallecidos. El doctor Enrique Sotomayor, jefe de Emergencias del Hospital Carlos Monge Medrano de Juliaca, expuso su preocupación por el severo daño interno que tenían las víctimas.
"Los pacientes tienen destrozados los órganos internos, con daños múltiples, es como una, como que fueran unas balas dum dum explosivas en el interior del cuerpo".
Enrique Sotomayor, jefe del Departamento de Emergencias del Hospital Carlos Monge Medrano.
En redes sociales, abundaron las acusaciones contra el Gobierno de Boluarte de usar una munición prohibida. Sin embargo, como se explicó en La Encerrona, esas lesiones podrían deberse a balas de punta hueca y a disparos a quemarropa por perdigón.
Más tarde, se divulgó el rumor principal. Que los ponchos rojos bolivianos habían infiltrado las balas dum dum que acabaron con la vida de los manifestantes en Juliaca.
El primer registro público que hallamos en Facebook data de las 11.58 p. m. del último 9 de enero, apenas seis horas y media después de las declaraciones del doctor. Alexander Manrique Reinoso —según su LinkedIn, asesor del Grupo Estilos, CREDISUR y COOPEBAN— relacionó a los ponchos rojos con la masacre en Juliaca. Como 'prueba' adjuntó una noticia del 2020 de El Diario sobre un militante del MAS detenido con "126 mil balas” y proyectiles “dum-dum" en Parotani, Bolivia.
Publicación de Alex Manrique Reinoso sobre el rumor. La más antigua y pública registrada. Foto: captura de Facebook
Ni esa ni otras noticias de la época sobre los hechos (1, 2, 3) mencionan a los ponchos rojos. Según el entonces viceministro de Comunicación boliviano, el coronel Iván Rojas señaló en ese entonces que esas balas se estaban trasladando de La Paz a Santa Cruz. Ruta opuesta si es que se quiere llegar a Perú.
Manrique se encargó de publicar el rumor minutos después en por lo menos ocho grupos públicos en Facebook. En conversación con Verificador, admitió no tener evidencia alguna que vincule a los ponchos rojos a este supuesto acto delictivo. Explicó que había llegado a la conclusión de sus posts combinando información sobre contrabando de armas desde Bolivia (aseguró que un amigo policía de Inteligencia se lo había dicho) y la noticia de 2020.
En la tarde del día siguiente, el 10 de enero, la diputada chilena Chiara Barchiesi denunció una supuesta influencia de Morales Ayma en la matanza de Juliaca, que incluía el “envío de armamento".
Por la noche, a las 9.40 p. m. (hora Lima), el congresista Jorge Montoya, ferviente difusor de desinformación (1, 2, 3), culpó al MAS (partido del Gobierno boliviano) de estar detrás de la violencia durante las protestas en una entrevista para Cadena A Red Nacional, de Bolivia.
“Gente del MAS (Movimiento al Socialismo, partido de Evo Morales), han sido los llamados ponchos rojos (...) han sido descubiertos en la frontera pasando munición debajo de su ropa, munición dum dum que ha sido empleada en las asonadas de violencia que han habido en Puno en Juliaca”.
Jorge Montoya, congresista de Renovación Popular.
Más adelante, señaló que se trataba de “información periodística” que le había llegado “hace un par de horas”. Cuando Verificador le pidió la “información periodística” a la que se refería, el legislador admitió no poseerla. Además, explicó que siempre se había referido al rumor como “no confirmado” y que nunca lo validó.
A partir de esa hora, el contenido de los primeros posts de Manrique comenzó a circular también en grupos, páginas (1, 2) y medios bolivianos (1, 2, 3).
Un día y medio después del primer registro de este rumor, el 11 de enero a las 3.00 p. m. (hora Lima), el diputado boliviano por Creemos Erwin Bazán Gutierrez, autodenominado "defensor de la honestidad y la verdad", contribuyó a expandirlo.
"Quería referirme al tema de los ponchos rojos, a quienes en las últimas horas, según la información pública, se ha encontrado transportando 126.000 balas rumbo a Perú. ¿Esas balas son para armar a los partidarios de Pedro del Castillo en Perú? ¿Son para armar violentas revueltas?".
Erwin Bazán, diputado de Creemos.
El legislador boliviano menciona el mismo número de balas que el artículo adjunto a la primera publicación de Alexander Manrique Reinoso: 126.000.
Ambos políticos acusaron a los ponchos rojos de transportar armas pese a que ese dato no está recogido en las noticias de 2020 sobre el tema. Por tanto, la información que distribuyen es la misma que fue difundida en redes sociales por Manrique (que combina 'ponchos rojos' y retención de balas dum dum) el pasado 9 de enero.
Hasta la fecha, Bazán no ha presentado prueba alguna sobre sus afirmaciones. Ante el cuestionamiento de Verificador, prefirió no dar sus descargos.
A partir del 12 de enero, varios medios de comunicación peruanos replicaron las declaraciones de la diputada Barchiesi y de Bazán sin cuestionar la falta de pruebas. Tampoco mencionaron que la información sobre los 126.000 proyectiles incautados correspondía a una noticia del 2020.
Algunas portadas de los medios que compartieron el rumor sin cuestionar declaraciones. Foto: composición LR/ Web
Con esto, el rumor se expandió en redes. De acuerdo a Crowdtangle, del 10 —día en que aparece de manera pública— al 14 de enero, pasó de 50.000 interacciones diarias a 159.000 solo en Facebook.
Del 10 al 14 de enero, las interacciones con el rumor en Facebook se triplicaron. Foto: captura de Crowdtangle.
Pasó poco tiempo para que la prensa le pregunte sobre este rumor a la Policía. El 13 de enero por la mañana, el general PNP Óscar Arriola, jefe de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote), consultado sobre el tema, prefirió no dar detalles.
"Hay investigaciones que están en giro, (sobre las) que no se puede (hablar) en estos momentos (...). Pronto, seguramente, se informará".
General PNP Óscar Arriola, jefe de la Dirección contra el Terrorismo
Le preguntamos a la institución si existían indicios mínimos para que esta investigación sea llevada a cabo. Nos respondieron con el link del comunicado que prohibía el ingreso al país de Evo Morales. Nada específico sobre el caso.
Por la noche del 13, a las 9.45 p. m., Dina Boluarte, en un mensaje a la nación, mencionó por primera vez el rumor del supuesto contrabando de balas desde Bolivia a Perú.
"Hoy sabemos que un tipo de armas de fuego y municiones habrían ingresado al país por el sur del Perú. Esas son las que podrían haber causado la muerte de nuestros compatriotas. Que se investigue".
Dina Boluarte, presidenta por sucesión, 13 de enero de 2023.
El titular de la Presidencia del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, dos días después, en una entrevista para Latina, habló de indicios y pruebas sobre este hecho.
"Existen indicios y pruebas de que así ha sido. Y de que no solamente ha habido un trasiego de material de Bolivia acá, sino un trabajo también sistemático y permanente de algunos expresidentes".
Declaraciones del premier Otárola para Latina.
¿A qué indicios hace referencia Otárola? Ese mismo domingo en Panamericana, el ministro de Defensa, Jorge Chávez, mencionó dos: las declaraciones del doctor Enrique Sotomayor (que se refirió a la situación de los afectados) y las acusaciones de los diputados extranjeros.
Sin embargo, estas no son pruebas. Además, están bastante cuestionadas. Sobre las declaraciones del médico, Alexandra Ampuero, de la Unidad de Investigación de La República, ya había revelado el 13 de enero que los proyectiles encontrados en el cuerpo de nueve de los fallecidos son de armas típicas de la PNP.
Por otra parte, ninguno de los diputados referidos ha presentado al momento alguna evidencia. Como tampoco lo han hecho el Gobierno de Boluarte y los replicadores del rumor. Nadie ha precisado nombres de los involucrados, fechas, o un lugar concreto.
A partir del 17 de enero, la conversación sobre el supuesto contrabando de balas bolivianas hacia Perú decayó bastante. Sin embargo, la propia presidenta se encargaría de revivirla el 24 de enero ante la prensa extranjera.
Sobre la conversación acerca de los ponchos rojos en Perú. Foto: captura de Crowdtangle
El último 14 de enero, un vocero de la organización le reclamó al congresista Montoya que expandiera "tan suelto de huesos" el rumor. Luego, se dirigió al congresista Erwin Bazán en ese mismo sentido.
"Tiene que demostrar de manera material de cuándo, quiénes y de qué forma habrían llevado estas municiones para generar violencia en el hermano país del Perú. Porque no puede ser que, por el hecho de ostentar un título en este caso, como ser diputado nacional, hable las cosas sin fundamento".
Vocero de Ponchos Rojos. 15 de enero de 2023.
El último 25 de enero, Ruddy Condori, dirigente del sector campesino de los Ponchos Rojos, respondió a Boluarte ante el medio boliviano Urgente.
"Si la presidenta (Boluarte) tiene elementos materiales para acusar a los ponchos rojos, para acusar de esta situación, que las presente; caso contrario, que se calle".
Ruddy Condori, dirigente del sector campesino de los Ponchos Rojos.
Ni la diputada Barchiesi, ni el diputado Bazán, ni la presidenta Boluarte, ni el ministro de Defensa, ni el primer Otárola presentaron sus descargos ante la solicitud de Verificador.
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