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Sociedad

Así cayó el ‘Gordo Tobi’ y su banda, que iba a enviar 1.881 kilos de cocaína a Europa

Fue detenido con otros cuatro narcos, entre ellos un extranjero. Otros tres lograron escapar. Cargamento de droga iba a ser trasladado en una lancha hasta altamar, en Máncora, Piura.

Cargamento de cocaína iba a ser trasladado en una lancha artesanal hasta altamar, donde luego sería embarcado en un buque que ahora es buscado por las autoridades. Foto: composición LR / PNP
Cargamento de cocaína iba a ser trasladado en una lancha artesanal hasta altamar, donde luego sería embarcado en un buque que ahora es buscado por las autoridades. Foto: composición LR / PNP

El operativo fue riguroso y exitoso. Un golpe letal luego de tenerlo prácticamente acorralado. Así fue la detención de Jorge Enrique Bazán Aguilar, alias ‘Gordo Tobi’, líder de una organización criminal que pretendía sacar más de 1.881 kilos de cocaína por el balneario de Mancora, en Piura.

Cada ‘ladrillo’ de estupefaciente tenía como marca en alto relieve tres estrellas y las letras MR. Este cargamento de droga fue elaborado en narcolaboratorios del Vraem y el Huallaga, y tenía a Europa como destino final.

La República tuvo acceso a detalles de la captura de esta red. Se supo que está no es la primera vez que cae en manos de la justicia el ‘Gordo Tobi’. En diciembre del 2012 fue capturado en Máncora por robo agravado.

Esta vez volvió a ser aprehendido cuando pretendía darse a la fuga en una camioneta BMW, de placa F0R-261, con dirección al centro de Piura.

La operación Pirata comenzó a las 10.00 de la noche del lunes, cuando miembros del Departamento de Operaciones Especiales-Grupo Orión de la Dirandro; personal de la comisaría sectorial Talara; y la Fiscaliza Especializada Contra la Criminalidad Organizada (Fecor) intentaron intervenir en el balneario Punta Ballenas (Máncora) a los ocupantes de las camionetas P4D-915 y BBC-013.

Se confiscaron 43 maletas

Ellos habían dejado en la playa 30 maletas de lona con 40 paquetes de cocaína cada una. A orillas de la playa se encontraron otras 13 maletas atadas a una soga, listas para ser estibadas a una lancha artesanal, cuyo conductor se dio a la fuga.

En esa escena fue atrapado el venezolano Eduardo Ramón Zárraga Gonzales y se incautaron un automóvil BDZ-694 y cuatro motos acuáticas.

Jorge Bazán Aguilar cayó y fue trasladado a Máncora. Luego, con la participación de la fiscal adjunta Sugey Huamán, de la Tercera Fecor de Lima, se allanó un inmueble ubicado en el balneario Las Pocitas (Máncora) que era utilizado como centro de acopio y acondicionamiento de las 43 maletas.

Ahí fueron capturados los peruanos Julio Humberto Valles Sifuentes (54), Eddy Ferly Díaz Llaury (53) y Humberto Quezada Huamán (61). En el lugar se confiscó la camioneta T8L-816 y la moto lineal 1245-BT, así como elementos y accesorios utilizados en favorecimiento al tráfico de droga.

Las diligencias estuvieron a cargo de las fiscales Sujey Huamán y Carolina Hernández, del cuarto despacho de la tercera FSCECCO de Lima, y personal de la Dirandro de Paita.

Droga iba hacia altamar

Fuentes vinculadas a la investigación dijeron que durante más de un año y medio se intervinieron más de 30 líneas telefónicas, seguimientos y filmaciones. Así se pudo establecer que la banda solía trasladar droga desde el Vraem y el Huallaga.

Este cargamento de cocaína iba a ser trasladado en una lancha artesanal hasta altamar, donde luego sería embarcado en un buque que ahora es buscado por las autoridades marítimas.

Con optimismo, el fiscal superior Jorge Chávez Cotrina, coordinador de las fiscalías especializadas contra la criminalidad organizada, dijo que con esta operación se ha desintegrado a una poderosa firma del narcotráfico internacional.

“La Fecor, en coordinación con la Policía, seguirá realizando estos operativos secretos y continuaremos librando una dura lucha contra las organizaciones criminales”, indicó el magistrado a La República.

Periodista profesional, egresado de la Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza. Me gusta explicar, enseñar, compartir. A lo largo de mi carrera he cubierto casos resonantes que nos ha tenido más horas en la computadora que lo habitual, siempre aferrado a un estilo, que combina datos, análisis, entrevistas, crónicas.