Dos amigos mueren al caer automóvil a un abismo de 300 metros
Otro acompañante se salvó, pero se encuentra con pronóstico reservado. Trágico accidente ocurrió en la sierra limeña de Huarochirí.
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Dos amigos murieron y otro salvó de milagro su vida cuando el vehículo en el que se movilizaban cayó por un abismo de unos 300 metros, en la sierra limeña de Huarochirí.
El accidente, cuyas causas aún son un misterio, ocurrió en las primeras horas de este sábado en una zona denominada Pasamayito-Llamama, en la carretera de acceso a la comunidad campesina Chaclla, distrito de San Antonio de Chaclla.
Todavía no se sabe por qué el auto Kia, de placa W1W-291, en cuyo interior viajaba el grupo de amigos, cayó por el barranco. Un testigo dijo que el auto comenzó a deslizarse por el precipicio luego de pasar una curva muy cerca del borde y en un sector demasiado peligroso, en bajada.
A las 8.40 a. m., 11 suboficiales del batallón Delta de la Unidad de Rescate Diropesp-PNP llegaron al lugar de la tragedia y luego de más de tres horas consiguieron descender hasta la zona donde se encontraba el destrozado vehículo.
Sin perder tiempo, los efectivos auxiliaron a Elmer Hinojosa Huamán (41), quien tenía traumatismo encéfalo craneano, fracturas en el brazo izquierdo y sangraba en la espalda. Fue trasladado en una ambulancia al centro de salud de Carampoma, jurisdicción de Santa Eulalia.
Recién a las 01.30 p. m. recuperaron los cuerpos del copiloto Juan Carlos Francia Casio (39) y del chofer Joel Gilmer Huamanciza Carlos (48), quienes se encontraban atrapados entre los fierros retorcidos.
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El fiscal Martín Pomalazo Flores, de la Fiscalía Corporativa Provincial Penal de Huarochirí dispuso el traslado de los cuerpos a la morgue.
El accidente se produjo al promediar las 7.00 a.m. En esa zona de Pasamayito existen abismos y los vehículos generalmente pasan al borde de la pista en medio de la densa neblina.
Las rocas y los arbustos amortiguaron el golpe y el auto quedó totalmente destruido.
El ascenso escarpado dificultó las tareas de rescate de los cuerpos.
La única hipótesis posible que manejan las autoridades es que el conductor había perdido la visibilidad de la ruta por la espesa neblina. Y que, en ese momento, por el peso de sus ocupantes y la bajada del suelo, comenzó a perder el control y a deslizarse con las trágicas consecuencias conocidas.
Periodista profesional, egresado de la Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza. Me gusta explicar, enseñar, compartir. A lo largo de mi carrera he cubierto casos resonantes que nos ha tenido más horas en la computadora que lo habitual, siempre aferrado a un estilo, que combina datos, análisis, entrevistas, crónicas.
