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Sociedad

Lambayeque: siguen amenazas contra defensores de Reserva Ecológica de Chaparrí

Dirigentes de comunidad campesina piden a autoridades mejorar protección a 25 personas. Se denunció irregular intervención de la Policía.

Comuneros de Chaparrí siguen recibiendo amenazas por desconocidos. Foto: La República
Comuneros de Chaparrí siguen recibiendo amenazas por desconocidos. Foto: La República

Una reciente denuncia del dirigente de la comunidad campesina Muchik Santa Catalina de Chongoyape, Wilson Bautista Sánchez, sobre una intervención policial irregular, expone una vez más el contexto de inseguridad en el que se encuentran los defensores de la Reserva Ecológica de Chaparrí, en la región Lambayeque.

En entrevista con La República, Bautista Sánchez mencionó que en marzo de 2018 un total de 25 personas fueron beneficiadas, entre comuneros y ambientalistas, con garantías de protección por parte de la Policía Nacional. Sin embargo, las amenazas por parte de presuntos traficantes de tierras persiste.

Siete meses después, en octubre de 2018, la Policía y la Fiscalía capturaron 12 presuntos integrantes de la red criminal “El Gran Chaparral”, implicados en diversos actos delictivos cometidos en la Reserva Chaparrí y la comunidad campesina “San Francisco de Asís” de Salas, entre ellos el asesinato a cuatro personas para favorecer el tráfico de terrenos.

El pasado 16 de enero, Wilson Bautista, quien también es exsubprefecto de Chongoyape, denunció que policías y civiles llegaron de sorpresa para intervenirlo cuando realizaba labores de limpieza en el sector tres de la comunidad Santa Catalina Muchik.

“Aquella intervención fue irregular porque los policías alegaban la comisión de delitos de minería ilegal y tala, pero mi acción era todo lo contrario. Se estaban haciendo limpieza a una zona que está en proceso de recuperación tras su invasión”, afirmó.

En esa línea, detalló que integrantes de la exdirectiva de la comunidad campesina estarían detrás de la cuestionada intervención. Por este caso se ha denunciado penalmente a los policías de apellidos Mayanga y Medina, por los delitos de coacción y abuso de autoridad.

“Pedimos a la Policía mejorar sus medidas de protección a los comuneros. Es un contexto muy difícil por la pandemia y esperamos contar con el apoyo de las autoridades. Se pensaba que con la desarticulación del Gran Chaparral las amenazas acabarían, pero sigue la incertidumbre sobre qué nos pueda pasar”, acotó.

Mayor patrullaje

La Reserva Ecología de Chaparrí, con 34.412 hectáreas de terreno, se ubica dentro de la comunidad Muchik Santa Catalina, cuya extensión supera las 40.000 hectáreas. Es considerada la primera Área de Conservación Privada (ACP) del país y del norte peruano.

Para el actual presidente de la citada comunidad, Edivar Carrasco Vásquez, existe un clima de inseguridad contra los actuales directivos y comuneros debido a los objetivos por recuperar los sectores que fueron invadidos.

“Actualmente contamos con garantías de seguridad, pero necesitamos que la Policía mejor la ejecución de estas. No queremos garantías solo en un papel, se debe fortalecer las acciones de patrullaje. Entendemos que no existe un policía para cada persona, pero la vigilancia de las zonas, en determinadas horas de la noche, sería muy importante”, subrayó.

Egresado de la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo. Periodista en edición impresa y digital de La República.