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Sociedad

Santa Anita: acusan a joven de asesinar a su madre en complicidad con su pareja

La División de Homicidios de la PNP halló indicios para sindicar a Ángel Jefferson Romero Véliz por parricidio.

En un principio Ángel Romero dijo que su mamá murió de forma natural. Foto: Captura de Domingo al Día
En un principio Ángel Romero dijo que su mamá murió de forma natural. Foto: Captura de Domingo al Día

A más de dos años de la muerte de Ingrid Maritza Véliz Sosa, su familia asegura aún no encontrar justicia. Hace poco, la Policía capturó a dos sospechosos de haberla asesinado en su vivienda de Santa Anita, pero la Fiscalía resolvió no darles prisión preventiva.

El 19 febrero del 2018, la fallecida fue llevada al hospital Hipólito Unanue por su hijo Ángel Jefferson Romero Véliz (23) y la pareja de este, Joselyn Beatriz Ramos Sasi (21). Ellos adujeron que la mujer se había empezado a sentir mal de salud.

Los médicos indicaron que Ingrid Véliz había llegado muerta, pero ambos jóvenes dijeron que, cuando ellos la hallaron, aún estaba con vida. Luego aseguraron que se trató de un deceso por causas naturales; sin embargo, tras investigar el caso, la División de Homicidios de la PNP encontró indicios de que, en realidad, se trataría de un crimen.

“Se ha llegado a acopiar una serie de elementos de convicción, a través de los cuales se ha podido sustentar la incriminación de la presunta autoría en el delito de parricidio. (...) Cuando los investigados dan su primera versión respecto a los motivos por los cuales habían trasladado a la occisa hacia el hospital, ocultaron una serie de hechos que luego se fueron esclarecieron”, señala el coronel Erick Ángeles, jefe de la División de Homicidios de la Dirincri.

De acuerdo a Domingo al Día, la necropsia revela que la occisa presentaba traumatismo encéfalo craneano; es decir, fue golpeada en la cabeza con un objeto contundente. La prueba también arrojó lesiones traumáticas recientes en el cuerpo.

Consultado por lo anterior, el hijo acusado dijo en su manifestación policial que los golpes que tenía su madre eran producto de un accidente.

Para los investigadores, el móvil del crimen habría sido la ambición del presunto parricida para quedarse con la casa y las demás propiedades de su progenitora. El coronel PNP Ángeles asegura que, tras la muerte, Ángel Romero hizo trámites para que el auto de su madre pase a nombre de su pareja Joselyn Ramos.

Asimismo, Carlos, el otro hijo de Ingrid Véliz, dijo que el 25 de abril del 2019 fue a su visitar a su hermano para hablar de la casa, pero este se portó agresivo y lo atacó con un fierro.

En medio de la discusión, Ángel habría confesado que mató a su mamá, según relató Carlos. “Él, con una barra de fierro, da vueltas por toda la sala. Yo le pregunté y me dijo ‘sí, yo maté a mi mamá’. Ya se murió, ahora quién te va a defender”, contó.

Las hermanas de la occisa dicen que ella discutía constantemente con Ángel porque deseaba que estudie o trabaje, pero él no quería. Incluso, cuentan que la golpeó dos veces, pero la mujer se negó a denunciarlo porque era su hijo.

Un año después de la muerte de su madre, Ángel se fue de la casa junto a su pareja, pero hace pocas semanas fueron capturados por la Policía debido a los resultados de la investigación policial.

Pese a ello, el Ministerio Público dejó en libertad a ambos, lo que causó la indignación de la familia de la fallecida, que sigue en búsqueda de justicia.

“Esta es la fiscal Nelly Rivera Martel. Ella los ha soltado teniendo todas las pruebas de que ellos la han asesinado a mi hermana. Lo único que queremos es que paguen los dos”, reclama Blanca Véliz, hermana de la fallecida.

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