Incendio forestal acabó con la vida de ocho comuneros en Cusco
FUEGO. Anciano de 75 años de edad habría ocasionado el voraz siniestro al realizar una vieja costumbre conocida como Roce con la intención de preparar la tierra para una nueva siembra.
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Luis Álvarez
Cusco
Un niño quedó como petrificado mirando arriba y con las manos tratando de cubrirse el rostro. Otro, a unos escasos metros de distancia, yace tirado boca abajo en una acequia adonde llegó tratando de salvarse del fuego. Más allá, un adulto está tieso con la mirada al cielo y las manos congeladas como si hubiera lanzado manotazos para defenderse de la candela, y otro varón está rígido en una postura que lo muestra como si se retorciera mientras era envuelto por las lenguas del fuego.
Ocho campesinos de la comunidad campesina de Andayaje del distrito de Ccatcca, provincia cusqueña de Quispicanchi, murieron calcinados en el infierno que fue el incendio forestal ocurrido el jueves en la zona Sincunamocco-Andayaje. Cuatro son menores y cuatro adultos. Al promediar las 14.00 horas de ayer, brigadistas, bomberos, serenos y comuneros controlaron el incendio forestal en la que se evidenció esta escena de terror.
El fuego además arrasó con aproximadamente 100 hectáreas de corteza natural y bosques de eucalipto y pino.
Costumbres peligrosas
De acuerdo a lo informado por el presidente de las Rondas Campesinas, Donato Machaca, la tarde del último miércoles, Tiburcio Q. Q de 75 años de edad acudió a su chacra en la comunidad de Andayaje para realizar una peligrosa y vieja costumbre conocida como “Roce”. Esta consiste en la quema de pastizales y maleza para dar paso a una nueva siembra, pero el fuego se hizo incontrolable. “Es un anciano que reconoció su error y pidió perdón”, refirió.
Las lenguas de fuego que amenazaban con llegar a lugares poblados hizo que decenas de comuneros intenten sofocar el siniestro y acudieron a la emergencia quedando atrapados en medio de las llamas. Muchos pudieron salir, sin embargo, 39 quedaron con serias heridas y fueron referidos a los nosocomios de la ciudad del Cusco al presentar quemaduras de segundo y tercer grado. Entre los graves hay un menor de 13 años de edad.
Para el alcalde del Centro Poblado de Andayaje, Jesús Machaca, existe responsabilidad en las autoridades; “demoraron en enviar a las brigadas, no se actuó oportunamente, la gente se entregó al fuego” manifestó.
La emergencia en Quispicanchi ahondó más la crisis hospitalaria que se encuentra en colapso por el coronavirus. La falta de ambulancias retrasó la evacuación de heridos a los nosocomios cusqueños, donde el personal no se abastecía para atenderlos. “Tenemos tres pacientes que requieren ser trasladados con urgencia a Lima, uno es un menor de 13 años, lamentablemente no tenemos un banco de piel. Ellos tienen el 50% del cuerpo con quemaduras”, refirió Rebeca Alarcón, jefa de la Unidad de quemados del Hospital Regional.
Zonas peligrosas
Todas las provincias en Cusco presentan condiciones medias a muy altas para la ocurrencia de incendios, siendo Paruro, Canas, Chumbivilcas, Quipicanchi, Acomayo y Espinar las que tienen más de un 90% de su territorio comprometido. Cusco, Calca, Canchis, Anta y Urubamba, tienen más del 70 % de su territorio con altas condiciones. Asimismo, más del 40% del territorio de Paucartambo y La Convención respectivamente.
Estas condiciones generan que una simple quema o fogata desencadene en un incendio incontrolable. En Perú, el 98% de los incendios son originados por el hombre, revela un estudio del Ministerio de Ambiente.
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