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Sociedad

Vecinos de Lince piden que se revoque licencia de funcionamiento a funeraria

Familias del condominio El Milagro tienen que soportar día a día los olores fétidos y lidiar con el ingreso de ataúdes.

Retiro de caja fúnebre del edificio. Foto: Captura
Retiro de caja fúnebre del edificio. Foto: Captura

Entre olores nauseabundos y el paso de cajas fúnebres. Así es el día a día de las familias que decidieron adquirir un departamento en el condominio El Milagro, ubicado en el distrito de Lince, sin saber que meses después comenzaría a operar ahí una funeraria.

Desde noviembre de 2019, denuncia uno de ellos de forma anónima a La República, por temor a represalias, féretros son ingresados y retirados diariamente por una empresa oculta a simple vista y que trabaja a puertas cerradas omitiendo las denuncias de las personas que habitan pisos arriba.

El principal temor de la junta de propietarios de este edificio multifamiliar es que el lugar se pueda convertir en un foco infeccioso, sobre todo si se tiene en cuenta el contexto de la crisis sanitaria generada por el nuevo coronavirus.

Todo cambió para la familia de uno de los denunciantes pocos meses después de cumplir el sueño de la casa propia.

Un día, su concuñada se percató que olores fétidos emanaban del primer piso, despertando la sospecha de lo que se hacía en aquel lugar. Lo que terminaron por ver fue algo que los dejó estupefactos: una caja fúnebre era ingresada por unos hombres al edificio.

Si bien fueron informados de los tres locales comerciales que serían alquilados, nunca les indicaron que se podría llegar al punto de destinar uno para una empresa del rubro funerario, el cual responde al nombre de Funeraria Miraflores EIRL.

Con el transcurso de los días, notaron que en el local, ubicado exactamente en el Jirón Coronel Manuel Gomez N° 408, Lince, se trabajaba a puertas cerradas acondicionando el lugar. El estruendo de los martillos no dejaba de sofocar la tranquilidad de los vecinos, quienes no dudaron en expresar su incomodidad convocando a una junta.

En aquella reunión, la propietaria del local aseguró que el lugar sería destinado tan solo a un almacén, donde se guardarían cajas. Sin embargo, grande fue la sorpresa del testigo cuando, investigando, descubrió que se trataba de una empresa que brindaba servicios funerarios, primero de tipo tanatoestetica, pero que luego fue aumentando sus giros.

“No sabemos el tipo de prácticas que realizan. Nos han querido silenciar con cartas notariales, maquillan los olores, han contratado gente para amedrentar a los vecinos”, indica uno de los habitantes.

Tuvieron que llegar a denunciar el hecho en una audiencia vecinal, frente al mismo alcalde de Lince, para que sus peticiones fueran aceptadas, pero al día de hoy, además de dos cartas que se limitan a darles la razón, no tienen respuesta.

“Les pedimos que revoquen la lincencia de funcionamiento y se comprometieron a cerrarlo en 5 días, pero parece que priman los intereses económicos”, sostiene.

“Al respecto, personal de Vigilancia Sanitaria llevó a cabo la inspección del caso en forma conjunta [...], encontrando un almacén y una sala de preparación de cadáveres, percibiendo olores ofensivos”, reza la carta remitida por la comuna a los propietarios del edificio.

Lince

Carta remitida por la comuna de Lince.

La República intentó comunicarse con representantes de la Municipalidad de Lince para obtener su versión, pero hasta el cierre de la nota no existió respuesta alguna.

Funeraria Miraflores EIRL, por su parte, figura como una empresa especializada en pompas fúnebres y actividades conexas creada en 2013 y con sede en Callao. Se llamó al número con el que aparece registrado, sin obtener respuesta.

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