En 60% se redujo contaminación de aire y ruido en Arequipa por cuarentena
BENEFICIOS. La Ciudad Blanca es una de las ciudades más contaminadas del país. Antes de la cuarentena su aire era tóxico por las emisiones provenientes del parque automotor.
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Wilder Pari
Arequipa
La cuarentena para detener el coronavirus mejoró la calidad del aire de la ciudad de Arequipa. El director de Salud Ambiental, Zacarías Madariaga, señaló que la contaminación atmosférica, provocada mayormente por el parque automotor, disminuyó hasta un 60%. Al día quince de cuarentena, expresó que la caída debe llegar a un 70%.
“Es un hecho inusual, nunca ocurrió”, sostuvo Madariaga, quien añadió que en las paralizaciones de transporte o huelgas, la ciudad no ha registrado un cambio tan drástico. Concluye que la principal razón es la disminución de vehículos. El transporte público funciona con menos de la mitad de unidades y los autos particulares están prohibidos de circular, salvo que tengan salvoconductos. Por ejemplo, en la avenida La Salud el valor normal ascendía a 65 microgramos por metro cúbico de material particulado. Ahora marca de 25 a 30. Una disminución notable.
Sin embargo, Madariaga precisó que esta reducción no bajará del 70%, pues la otra parte proviene de las actividades industriales. Las principales beneficiadas de una mejora de calidad de aire son habitantes con enfermedades respiratorias crónicas, como asma o rinitis.
El ruido también registró una baja. Madariaga informó que una medición en avenida La Salud obtuvo una marca de 50 decibeles.
Antes del estado de emergencia y las restricciones de tránsito, bordeaba los 90 decibeles. Madariaga remarcó que el ruido incrementa el estrés, que también afecta al sistema inmunológico.
Una menor contaminación se replica en todas las ciudades que paralizaron sus actividades. En China, país desde donde se expandió el virus, se registró un descenso de hasta 50% en emisiones de dióxido de nitrógeno.
Mayor uso de agua y más basura
Pero existen otros efectos de tener a las personas confinadas en sus domicilios. Por ejemplo, se registra un mayor uso del agua potable. Sedapar informó que este aumento de consumo genera desabastecimiento inusual en los reservorios.
En un comunicado, Sedapar considera que ante la creencia errada de que no se cobrará el recibo de marzo, la gente consume agua de forma desmedida, regando jardines, lavando autos o baldeando veredas.
Del mismo modo, se ha registrado un aumento en los desperdicios sólidos. En la Municipalidad Distrital de José Luis Bustamante y Rivero, se indicó que la gente bota desde escombros hasta fierros, pues estarían eliminando de sus casas materiales inservibles.
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