Sunass: antes de actualizar tarifas, EPS debe mejorar servicio de agua

La Oficina Desconcentrada de la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass) ha condicionado la actualización de las tarifas de agua potable y alcantarillado de la Empresa Prestadora de Servicios (EPS) Grau, al mejoramiento de estos servicios.

La representante de este organismo en Piura, Irina Palomino Távara, informó que esta exigencia forma parte del nuevo proyecto de estudio tarifario de la EPS Grau para el periodo 2020-2025, que será presentado este viernes en audiencia pública.

Refirió que el proyecto busca mejorar la calidad de servicio en los próximos cinco años en 28 localidades de la región, que administra la EPS Grau por medio de las zonales de Piura, Sullana, Paita, Talara y Chulucanas.

Aseveró que las metas de gestión están vinculadas a la reducción de pérdidas del recurso hídrico, la formalización de las conexiones clandestinas y al aumento progresivo de las horas del servicio, principalmente en sectores más críticos.

De esta manera se pretende mejorar la infraestructura de la empresa en mención para recibir las inversiones y megaproyectos como los que actualmente ejecuta el Ministerio de Vivienda, tal es el caso de la ampliación de la planta de Curumuy, el mejoramiento de la planta de tratamiento de aguas residuales de Sullana, así como de la planta de El Arenal que beneficia a Paita y Talara.

Palomino explicó que con la actualización de las tarifas de agua se ha programado recaudar 203 millones de soles para realizar inversiones en las 28 localidades.

Indicó que S/183 millones serán para invertir en infraestructura de agua y alcantarillado; mientras S/30 millones, para crear un fondo que permita hacer frente a escenarios de riesgo como el fenómeno El Niño u otro evento.

Entre los principales beneficios del proyecto de estudio tarifario está el mejoramiento de la continuidad del servicio, con lo cual la población tendrá más horas de agua potable en sus hogares.

Asimismo la EPS deberá instalar y renovar los medidores para garantizar el pago justo del recurso, acorde con el consumo responsable; rehabilitar la infraestructura del sistema de agua y desagüe para evitar pérdidas y disminuir el colapso de los sistemas de saneamiento.