Satipo, el paraíso de la selva central
Llena de impresionantes cataratas, costumbres ancestrales conservadas a través de los años, frutos exóticos, expresiones artísticas y deliciosa gastronomía, Satipo es un destino turístico que debe ser tomado en cuenta por todo aquel turista que disfrute de la aventura.
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Por: María Elena Hidalgo
A Satipo se llega luego de diez horas de viaje desde Lima por la carretera central y de recorrer 506 kilómetros.
Satipo es la provincia que posee la mayor cantidad de cataratas en el Perú. Son 176 cataratas dentro de su territorio, entre ellas la tercera con mayor salto de agua del mundo que ha sido bautizada como Las tres hermanas debido a que se trata de tres caídas de agua de 914 metros que se encuentran juntas.
Una de las más concurridas por su fácil acceso es la catarata Tina de Piedra o Imperitaja, ubicada en el distrito de Pangoa. Esta catarata cuenta con una altura de 16 metros.
Tina de Piedra se ha convertido en el deleite de los turistas que pueden disfrutan de la piscina natural de piedra que forma su caída de agua y en el que se dan un refrescante baño. La catarata se encuentra en medio de la espesura del bosque.
En Satipo existen todavía muchas cataratas por explorar, principalmente las ubicadas dentro del territorio del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM) que son muy poco conocidas debido a la presencia de remanentes terroristas y del narcotráfico.
La provincia agrupa distintas etnias que mantienen viva su cultura ancestral como los Asháninkas, los Amuesha, los Kakinte y Nomatsiguenga, que también se han convertido en el atractivos turísticos del lugar.
La etnia con más presencia está conformada por los nativos Asháninkas, cuya vida gira en torno a la caza y la agricultura.
En el distrito de Mazamari se encuentra la comunidad nativa de Boca Capirushari, un lugar donde el viajero puede practicar turismo vivencial practicando sus costumbres ancestrales junto a ellos como sus bailes, cánticos, practicar el tiro al blanco con flecha y aprender a confeccionar sus artesanías como collares, aretes y pulseras a base de pepas de frutos.
El visitante también puede vestirse con ellos y degustar su platillos elaborados en fogatas donde se asan plátanos, yucas, camote y la carne de los animales de monte que logran cazar.
Boca Capirushari cuenta con cerca de 30 integrantes y tiene como jefe de la comunidad a Galindo Chiricente. Para que el turista disfrute de esta experiencia ancestral, debe de contactarse con la Municipalidad Provincial de Satipo y solicitar el tour.
Una de las más fuertes actividades económicas de Satipo es la agricultura. El cultivo de Cacao café, camu camu, piñas y naranjas, entre otros, pone en marcha la economía del lugar.
El aromático café de Pangoa es considerado uno de los mejores del mundo. Su elaboración es producido de manera sostenible y libre de químicos y es exportado a Europa.
Los productores cafetaleros se encuentran asociados en la Cooperativa Agraria Cafetalera Pangoa. Además de café, la cooperativa acopia y comercializa cacao con certificado orgánico, cumpliendo estrictos cuidados que garantizan la calidad de su producto.
Un nuevo fruto exótico, el “Jack Fruit” , viene siendo cultivado en el distrito de RíoNegro. Se trata de la fruta más grande del mundo y puede llegar a pesar hasta 50 kilos. Esta fruta es originaria de Indonesia y viene siendo cultivada por el técnico agropecuario Saúl Llantoy.
Esta fruta exótica es reconocida por la multitud d beneficios que posee. Debido a su alto contenido en vitamina A y C, calcio, fitonutrientes, minerales y proteínas, es considerado un superalimento. Actualmente su venta es solo a pedido.
La gastronomía de Satipo es un punto aparte. Tacacho, cecina, patacones, doncella fritas son los principales platos que ofrece el buffet selvatico.
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