Metropolitano inaugurará 14 nuevas estaciones
Salud

Aportes contra el COVID-19 mientras llega la vacuna

Investigaciones. No menos de un año es el plazo para dar con la vacuna contra el coronavirus. Por ahora, los científicos peruanos pueden aportar también en el diagnóstico y tratamiento del mal. Las autoridades deberían prestar atención mucho más a nuestros especialistas. Lo más urgente, según el investigador Edward Málaga-Trillo, es aumentar la capacidad de diagnóstico del INS.

Las vacunas y el agua potable evitan cada año la muerte de 3 millones de personas en todo el mundo. Y estamos tan acostumbrados a este beneficio de la ciencia que solo se convierte en noticia cuando sucede una pandemia como la del COVID-19. Una razón más para no bajar la guardia a la hora de invertir en ciencia, higiene pública y salud.

Para los científicos, hallar una vacuna contra el coronavirus es cuestión de tiempo... pero es precisamente el tiempo lo que no tienen los gobiernos ahora que deben enfrentar la pandemia. Según la OMS por lo menos existen 40 iniciativas para hallar la mentada vacuna pero se trata de un proceso que puede durar, mínimo, un año (ver infografía).

Mientras usted lee estas líneas, hay 45 adultos (de 18 a 60 años) que están participando en la Fase 1 del ensayo clínico para una vacuna contra el COVID-19. Según información de la Organización Mundial de la Salud (OMS), este ensayo es realizado en los laboratorios de la KPWHRI y financiado por el propio Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, de EE.UU.

Esta vacuna, denominada ARNm1273, ya demostró su capacidad en pruebas con animales y utiliza la última tecnología en vacunas basadas en el ARNm, es decir, en el ácido ribonucleico que transfiere código genético procedente del ADN.

Los esfuerzos científicos se multiplican por todo el mundo. El Perú no puede aportar en temas de vacunas, pero sí en tratamientos y otras iniciativas científicas.

“En el Perú no hay compañías biofarmacéuticas especializadas en vacunas para humanos”, reconoce el Dr. Edward Málaga-Trillo, Investigador en Neurobiología Celular y Molecular de la Universidad Peruana Cayetano Heredia.

Añade que “sin embargo, sí hay empresas como Farvet, que tienen experiencia y mucho éxito en la producción de vacunas para aves y cerdos. Ciertamente, se requiere diferentes autorizaciones y protocolos de bioseguridad. Leí en una entrevista de IDL Reporteros que la jefa del Instituto de Medicina Tropical, mi colega y amiga la Dra. Theresa Ochoa, mencionaba justamente que colegas de la Universidad Cayetano Heredia estaban trabajando en una vacuna contra el coronavirus a partir de una que se utiliza para pollos. Se sabe poco al respecto, pero espero que la iniciativa llegue a buen puerto y, de ser exitosa, cuente con la aprobación del Minsa”.

Málaga-Trillo cree, sin embargo, que los científicos peruanos tienen mucho que aportar: “En lo más urgente, cómo aumentar la capacidad de diagnóstico del INS. Esto permitirá data de mayor calidad y cobertura para evaluar el avance de la pandemia, decidir el alcance del aislamiento social y el reinicio de la actividad económica y productiva del país. Esto pasa por poner a disposición del Minsa toda la capacidad científica instalada, infraestructura, equipamiento y recursos humanos en institutos y universidades, es decir, abrir la cancha”.

Málaga-Trillo, Ph. D. en Microbiología e Inmunología, reveló que algunas iniciativas individuales han prosperado, pero otras se han encontrado con procesos de certificación sumamente engorrosos. “Por otro lado, mientras seguimos discutiendo sobre las ‘pruebas moleculares’ y las ‘rápidas’, podríamos tener ya equipos de biotecnólogos desarrollando nuevos métodos de diagnóstico molecular que no requieren los kits y equipos costosos por los que el Gobierno debe ahora competir con el resto de naciones”.

Diagnósticos del mal

Los comentarios de Málaga-Trillo coincidieron con la reciente declaración del titular de Salud, Dr. Víctor Zamora, quien advirtió en un reciente reportaje de IDL Reporteros que nuestra estrategia de diagnóstico corre riesgo porque “Trump ha comprado todos los PCR”.

Como se sabe, así como existen test de diagnóstico rápido de pacientes infectados, los científicos prefieren el denominando PCR, de uso rutinario en los laboratorios de microbiología de hospitales y universidades. Si la técnica de PCR no detecta el material genético del virus, el paciente no está infectado. Es la prueba más certera, pero los investigadores coinciden en que requiere personal entrenado para su aplicación.

Al respecto, Málaga-Trillo cree que si el ministro “tuviera un panel de expertos en biología celular, bioquímica y genética molecular, podríamos ya estar preparándonos para trabajar con pruebas moleculares rápidas, baratas y efectivas que no requieren PCR y que dejarán obsoletas a las pruebas moleculares que hoy pugnamos por comprar. Es lo que tiene la ciencia, te permite estar un paso adelante, ya se está haciendo en otros países, no tenemos que ser los últimos. Ciertamente, será necesario pensar fuera de la caja y adaptar las regulaciones a la situación de emergencia para poder lograr soluciones innovadoras que rompan nuestra dependencia tecnológica”.

El investigador reconoce que nadie en la comunidad científica vio venir esta pandemia “sin embargo, no hay ningún misterio”.

Es un virus que cambió de hospedero, uno de los conceptos biológicos más sencillos. “Con el correr de los días y semanas, hemos aprendido que había mucho de nuevo y complejo en la enfermedad del COVID-19, efectos que no habríamos podido predecir a partir de los conocimientos de que se disponía”, sostiene Málaga.

"Por eso es clave el trabajo interdisciplinario: además de médicos expertos en salud pública, virólogos, infectólogos y epidemiólogos, se requiere del aporte de biólogos celulares y estructurales, informáticos, matemáticos, bioquímicos, físicos. Todo el arsenal que la ciencia pueda poner a disposición de esta lucha. Para buena parte del mundo desarrollado, es el momento de la ciencia. Ojalá también lo sea para nosotros los peruanos”.

Toda crisis es una oportunidad para que el Estado y la sociedad entiendan que la ciencia no solo sirve para la innovación y el crecimiento económico: “Los científicos tienen el inmenso potencial de proveer soluciones cuando hay crisis, así como progreso y prosperidad cuando no las hay. Hace 500 años el Perú dejó de ser una sociedad basada en el conocimiento. Hoy tenemos la oportunidad de volver a serlo. Seámoslo siempre”, sostiene Málaga-Trillo.

La clave

Málaga-Trillo tuiteó que si el ministro Zamora “tuviera un panel de expertos en biología celular, bioquímica y genética molecular, etc., sabría que ya se están desarrollando pruebas que no requieren máquinas ni kits de PCR, que se pueden implementar en Perú y dejarán obsoletas las pruebas moleculares de hoy”.

vacuna

vacuna

Los artículos firmados por La República son redactados por nuestro equipo de periodistas. Estas publicaciones son revisadas por nuestros editores para asegurar que cada contenido cumpla con nuestra línea editorial y sea relevante para nuestras audiencias.