Marianella Ledesma y los asuntos pendientes en el TC para el 2020

Nuevos retos. La magistrada de 56 años, Marianella Ledesma , será la primera mujer en jurar como presidenta del Tribunal Constitucional (TC) este viernes 3 de enero y así afrontar una nueva etapa para los periodos 2020-2021.

Es así que Ledesma, junto a Augusto Ferrero Costa como vicepresidente y Ernesto Blume Fortini (saliente presidente 2018-2019) como director general de Centro de Estudios Constitucionales (CEC) asumirán la dirección del TC este 2020.

Marianella Leonor Ledesma Narváez es doctora en Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), así como docente de distintos centros de estudio superior –como la Universidad del Pacífico, la Universidad Pontificia Católica del Perú, Universidad de Piura, Unifé, UNMSM y la Universidad de Lima– entre el 2006 al 2014, año en que fue propuesta para integrar el Tribunal Constitucional.

Cabe mencionar que Ledesma ganó en la última elección al magistrado Eloy Espinosa-Saldaña con cuatro votos sobre tres.

A favor de Marianella Ledesma votaron José Luis Sardón, Ernesto Blume, Augusto Ferrero y la misma magistrada Ledesma; mientras que Espinosa-Saldaña, Manuel Miranda y Carlos Ramos Núñez apoyaron la otra lista.

Demanda competencial

La nueva presidenta del TC revisará la demanda competencial presentada por el expresidente del Congreso, Pedro Olaechea quién interpuso la medida ante la decisión del presidente Martín Vizcarra de disolver el Parlamento el pasado 30 de setiembre del 2019.

Mediante esta situación, Ledesma Narváez, junto con los otros 6 miembros, emitirán un pronunciamiento sobre si este recurso (que fue evaluado en diciembre último) es constitucional o no.

La institución recibió muchos cuestionamientos pues declaró fundado el fallo presentado por Sachi Fujimori a favor de la liberación de la excandidata presidencial Keiko Fujimori.

Como se sabe el Poder Judicial se encuentra evaluando el pedido de prisión preventiva contra Fujimori Higuchi presentado por el fiscal del equipo especial Lava Jato, José Domingo Pérez.

Denuncias internas

Marianella Ledesma no solo tendrá que sacar adelante decisiones que involucren a personajes políticos del país, sino también a funcionarios del mismo TC.

Por ejemplo, el magistrado Eloy Espinosa-Saldaña fue sindicado por Milagros Morales y Susana Távara, dos trabajadoras de la entidad constitucional, de ser autor de maltrato psicológico y agresión verbal, respectivamente.

Susana Távara, secretaria general del máximo órgano constitucional, aseguró el pasado 5 de diciembre ante el Pleno que fue humillada por parte del magistrado en una discusión entre ambos, lo que le provocó un desvanecimiento.

Asimismo, Távara expuso la denuncia contra Espinosa-Saldaña ante el TC. De igual modo señaló que estos hechos están tipificados como hostigamiento de género y violencia psicológica, según la Ley 30364.

Por otro lado, de acuerdo a un reportaje de Panorama, Espinosa-Saldaña también maltrató a Milagros Morales, quién laboraba desde hace más de 20 años en el Tribunal Constitucional.

Ella estaba a cargo del área de protocolo de la institución, pero la situación cambió en mayo de 2017 cuando, el magistrado requería una visa especial para una sesión de la Comisión de Venecia y a una actividad en Doha, Qatar. Este trámite, de acuerdo al testimonio de Morales, tardó 4 horas tras comunicaciones con la Cancillería del Perú y la embajada de Qatar.

Pese a la solución, Eloy Espinosa-Saldaña se negó a abordar el avión, alegando que no tenía el documento necesario. Por ese caso, envió un oficio a Manuel Miranda Canales, quien entonces era presidente del Tribunal.

“Definitivamente el doctor escribió esa carta en un momento de mucha furia, cólera, malestar e indignación, pero fue excesiva porque él pedía mi destitución. Hay canales y niveles de sanción: llamadas de atención por escrito, suspensión de una semana o 10 días. Pero él pidió de frente mi destitución”, expresó Milagros Morales.

“Lo que sentí en ese momento es que hubo un uso abusivo, indebido de poder hacia mí. Eso fue lo que sentí”, agregó.

El Pleno de la institución comunicó que a inicios de este 2020 (luego de la asignación de Ledesma) verá ambas denuncias contra Eloy Espinosa-Saldaña, ya que el magistrado no estuvo presente para brindar sus descargos por estar con descanso médico.

Espinosa-Saldaña responde

La República se comunicó con el magistrado Eloy Espinosa-Saldaña quién aseguró que “nada de lo que dice” Susana Távara es cierto y que todo lo sucedido se dio en una cuestión "estrictamente laboral”.

“La señora Távara dice que yo la he maltratado y lo único que ha habido es una discusión sobre cuestiones profesionales que en su momento ha ido a descargo porque este se planteó en una sesión que yo no estuve. Nada de lo que ella dice es cierto”, refirió Espinosa-Saldaña a este medio.

De igual manera, el letrado afirmó tener “elementos claros” que refutarían la denuncia presentada por Távara al pleno del Tribunal Constitucional. “La señora Távara dice que se ha sentido ofendida por un cuadre que le hice por algo estrictamente laboral. Tengo elementos claros para demostrar porque tengo insatisfacción con su trabajo y sí ella se ha sentido ofendida ya públicamente le pedí las disculpas del caso", manifestó.

Por otro lado, en el caso de Milagros Morales, Eloy Espinosa-Saldaña afirmó que “no tiene nada que ver” con la salida de la trabajadora de la institución y que él solo se basó en el reglamento interno del Tribunal.

“La señora Morales tiene un informe sobre su jefe inmediato diciendo que ella debió hacer gestiones para sacarme una visa para ir a Alemania-Qatar y no es cierto que eso se resolvió en 4 horas. Yo estuve 2 días varado en Alemania. Yo lo único que hice es pedir, de acuerdo al reglamento del Tribunal, que se le abra el procedimiento administrativo”, aseveró el letrado.

Asimismo, Espinosa-Saldaña dijo que dichas denuncias se hicieron cuando no estaba presente y que esto solo demuestra “claramente un intento de ciertos sectores” de desprestigiarlo debido a los casos que se evaluarán en la entidad. “Esto es claramente un intento de ciertos sectores de tratar de desprestigiarme a función a casos que se van a votar o casos de los yo soy ponente como el caso de Fujimori”, enfatizó.

Por último, el integrante del TC confirmó que estará presente en la ceremonia de asignación de la nueva presidenta, Marianella Ledesma y que “le desea la mejor de las suertes" ya que el tribunal “tiene un momento difícil” debido a los últimos pronunciamientos.

“Por supuesto (que estaré mañana en la presentación de Marianella Ledesma) Independientemente de cualquier consideración hay cuestiones institucionales que no se pueden dejar de lado. Yo voy a estar ahí. Es lo que corresponde”, refirió.

Sardón cuestionado

Otro tema que tendrá que evaluar Ledesma será el referido al magistrado José Luis Sardón, quién, según reveló el fiscal José Domingo Pérez, es cuñado de Javier Viso López de Romaña, quien figura como falso aportante en las planillas de Fuerza Popular.

En efecto, según dijo Pérez, Sardón de Taboada confirmó al integrante del Equipo Especial Lava Jato que está casado con Sandra Viso López de Romaña, hermana de Javier López.

Cabe recordar que José Luis Sardón es uno de los magistrados del TC que votaron a favor de declarar fundado el hábeas corpus que liberó a Fujimori Higuchi el último 29 de noviembre. También fue director de ‘Reflexión Democrática’, asociación que entregó 20 mil dólares a congresistas del fujimorismo el 2011.

Posteriormente cinco congresistas electos del fujimorismo votaron a favor de su elección como integrante del TC ese mismo año.

Por otra parte, Sardón, a través de su cuenta de Twitter, manifestó que “no puede saber todo lo que hacen” sus cuñados.

“En mi familia, como en muchas otras familias peruanas, hay quienes simpatizan y hay quienes detestan al fujimorismo. Ello no incide nada en mi afecto por ellos, ni menos en mi trabajo jurisdiccional”, escribió el magistrado en sus redes sociales.