Pesca negra
Congresistas pretenden eliminar la ley que persigue a la pesca ilegal.
Convergen en este propósito de eliminar la ley que faculta la persecución de la pesca ilegal y la defensa fiscal contra la acción depredadora de recursos naturales, congresistas de la oposición y del Gobierno. Nuevamente, estos polos opuestos se unen en un despropósito, esta vez destinado a proteger lo que se denomina “pesca negra”, en la que campean las mafias, los operadores ilegales y mucho dinero en el medio.
Se trata del proyecto de ley 3666/2022-CR, que busca derogar artículos de la Ley 3166, la cual reglamenta la lucha del Estado peruano contra el tráfico y comercio ilegal de la vida silvestre. Esta iniciativa legislativa ha sido impulsada al caballazo, contra el tiempo, sin mayor discusión, y con ese apremio va camino a debatirse en el Pleno del Congreso, luego de haberse aprobado su exoneración de trámite de debate.
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El Ministerio del Ambiente ha alertado sobre este proyecto y se ha opuesto a su aprobación, señalando que se está retrocediendo en la reforma realizada en el sector pesquero. Sin embargo, este proyecto cuenta con el aval del Ministerio de la Producción, bajo el argumento de que se está restringiendo excesivamente la pesca artesanal y limitando una actividad que es tradicional en nuestras costas. Los especialistas han señalado que no existe ningún peligro contra la actividad de los grupos de pescadores y que falta un mayor esclarecimiento del propósito de la ley, que es básicamente la protección de la flora y fauna.
Esta división entre el propio Gobierno ya es evidente y deberá ser explicada. O se responde negativamente a un lobby de quienes han mantenido su acción depredadora en el mar peruano y se deja sin mayores herramientas a los fiscales que deben perseguir este tipo de crímenes o se cede a las presiones de los grupos económicos que están detrás de estos pingües negocios.
La penalización de pesca organizada en zonas de veda, y que determina la ley que pretende derogarse, responde a la necesidad de proteger especies hidrobiológicas que, de otra forma, pueden ser depredadas. En el Perú ya se conoce de alimentos que han desaparecido producto de la sobreextracción o la poca protección del Estado.
Con la norma que están promoviendo bancadas como la de Fuerza Popular en alianza con Perú Libre, esta barrera de prohibición y limitación desaparecería. El aprovechamiento político de grupos como el de los pescadores artesanales hace aún más abominable la maniobra.
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