Nuevo desembolso Fonavi 22 de abril

El rencoroso Irán

“Las atrocidades del Estado islámico, una mezcla de fanatismo religioso con obvios intereses políticos, han sido un problema aparte”.

La persecución chiíta de Salman Rushdie ya parecía un asunto superado. El ayatola Khomeini, dictador religioso iraní, emitió en 1989 una fatwa para animar que el célebre novelista fuera asesinado. El edicto parecía haberse ido diluyendo con los años, al grado que entidades fanáticas de Irán fueron elevando el monto de la recompensa.

El premio por matar al autor de Hijos de la medianoche o Vergüenza pasó de US $2.8 millones a US $3.3 millones. Aun así, en casi 30 años que se sepa nadie se había animado a cometer esa bajeza. Rushdie pasó largos años haciendo la vida de un perseguido, hasta que empezó a circular más libremente. Khomeini murió pocos meses después de esa fatwa.

El gobierno iraní hace tiempo que ha tomado distancia de la fatwa de 1989, que buscaba castigar a Rushdie por el contenido de Los versos satánicos, novela que toca la vida de Mahoma. Pero los chiitas fundamentalistas mantuvieron su apego al criminal decreto, reanimando su vigencia cada tantos años. Gestos no libres de intención política local.

Ahora un golpe de puñal al cuello, en un acto académico de Nueva York, acaba de revivir toda la historia. Al escribirse esto no se sabe si el novelista sobrevivirá, pero sus días de actividad pública desaprensiva parecen haber quedado atrás. Todavía no se sabe qué tipo de atentado ha sido este, pero el fanatismo religioso o la búsqueda de notoriedad no pueden andar lejos.

En el 2003 una serie de caricaturas de Mahoma en un diario de Dinamarca desató, una vez más, furias musulmanas. Dos de los dibujantes tuvieron que ocultarse en resguardo de sus vidas, y por todo el mundo todo lo danés sufrió ataques desde lo islámico. Una religión que llama infieles a los devotos de las demás no debería ser tan sensible a las críticas.

Las atrocidades del Estado islámico, una mezcla de fanatismo religioso con obvios intereses políticos, han sido un problema aparte. Al ser sunnitas, son enemigos de los iraníes, lo cual ha contribuido a su derrota. Pero en numerosos casos, como comentó Benedicto XVI, hay una fibra de intolerancia, y hasta tanatismo, entre muchos seguidores de Alá.

La obra más reciente de Rushdie, Víctory City, una novela ubicada en la antigüedad de India, está anunciada para febrero próximo.

La República

Los artículos firmados por La República son redactados por nuestro equipo de periodistas. Estas publicaciones son revisadas por nuestros editores para asegurar que cada contenido cumpla con nuestra línea editorial y sea relevante para nuestras audiencias.