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Epicentro: Perú Libre

Un chat de coordinación política del partido de gobierno muestra intromisión en asuntos de Estado.

Tiempo de decisiones. No hay forma de mantener a un presidente del Consejo de Ministros que petardea a sus propios colegas de gabinete. Tampoco es legal que se pretenda dirigir el curso del gobierno desde un chat partidario, con el que se maneja la voluntad de la bancada en el Legislativo y que se infiltra en el Ejecutivo. Vladimir Cerrón interfiere en las decisiones del gabinete y la bancada; y Guido Bellido filtra información reservada y azuza acciones contra el propio Ejecutivo.

En los chats revelados por reconocidos periodistas de Epicentro TV, hay dos hechos políticos: la muerte de Abimael Guzmán y el pedido de renuncia contra el canciller Maúrtua, sobre los que se ha querido ejercer manipulación y coerción, situación que se comprueba con la difusión de los mensajes de WhatsApp de la bancada de Perú Libre, en un chat en el que participan Vladimir Cerrón, presidente del partido político de gobierno, y Guido Bellido, presidente del Consejo de Ministros.

El dirigente político, que no tiene ninguna función pública, prepara los comunicados que luego suscribirá la bancada, y el funcionario público en ejercicio organiza los ataques contra el canciller Maúrtua y el vicecanciller por sus opiniones sobre Venezuela. Pero también el titular de la PCM azuza a sus correligionarios para que ataquen a otros dos ministros del mismo régimen.

La vicepresidenta y ministra del Midis, Dina Boluarte, recibe ataques nutridos de la bancada porque es postulada por la prensa como un recambio potencial del actual primer ministro. El ministro del MEF, Pedro Francke, es acusado de mantener un presupuesto neoliberal. Todo este concierto en ningún momento transpone las fronteras de su organización y su gobierno. Son zancadillas, puñales y agravios entre ellos, paralizándose e inhabilitándose a sí mismos.

En el caso de la muerte de Abimael Guzmán, la posición partidaria pareció ser la de guardar silencio. Ningún comunicado de reacción, salvo cuando hubo una votación del gabinete para definir la cremación del cadáver del genocida, por iniciativa del titular de Justicia, Aníbal Torres. “Votación: 6 contra 13″, es el mensaje de Cerrón que parece celebrar la derrota de la moción que proponía incinerar los restos del senderista.

El chat difundido es tan abrumador que solo queda el recambio y una rápida resolución de la enésima crisis política en dos meses. El silencio y la mirada al costado del presidente Castillo no serán suficientes para recomponer un gabinete que se derrumba solo, dinamitado por dentro. Urge reparar y tomar distancia inmediata de Cerrón, garantizando a la ciudadanía que el eventual “portero” no está usurpando funciones.