Tras bastidores

Con sus publicitadas reuniones con los representantes de la Asociación Nacional de Municipalidades y con líderes políticos, el candidato de Perú Libre, Pedro Castillo, intenta consolidar ante la opinión pública su virtual triunfo electoral. Sin embargo, en los fueros internos de su partido libra una no tan silenciosa batalla con Vladimir Cerrón y sus allegados que reclaman mayor injerencia en un probable gobierno del lapicito.

Castillo ha sido rodeado por los técnicos de Juntos por el Perú que lidera Verónika Mendoza. El nuevo equipo ha preparado el Plan Bicentenario que aplicarían en los primeros 100 días de gobierno. Este plan es muy diferente a la propuesta de Cerrón, que apostaba por un gobierno de praxis “marxista-leninista-mariateguista”. También circula la versión de que Mendoza sería la primera ministra del gobierno de Castillo si el Jurado Nacional de Elecciones confirma su triunfo.

La reacción de Cerrón no se ha hecho esperar. El 11 de junio escribió en el Twitter: “Parece que algunos invitados no son conscientes del espacio que ocupan. Les recuerdo que Perú Libre es el que ha ganado las elecciones”. En otro, acompañado de una foto de él con Castillo, dijo: “La unidad del partido, el gobierno y el pueblo garantiza la verdadera democracia. El pueblo ha llevado al gobierno a un verdadero hijo del pueblo”. Otro detalle es que la mayoría de los congresistas electos pertenecen a las filas de Perú Libre.

Está claro que Cerrón va a querer imponerse en la designación del equipo de gobierno. Tendrá el apoyo de la bancada de Perú Libre. Falta saber si Castillo logrará imponer al equipo técnico de Juntos por el Perú. Los siguientes días lo dirán.