Sin cheque en blanco, Sr. Castillo

Si lo más probable es que Pedro Castillo ya ganó el derecho a ser presidente hasta 2026, este es el momento de ser extremadamente riguroso en la defensa de la democracia y sus reglas.

Respetar la democracia, aunque se crea que sus resultados pueden ser perjudiciales para sus ciudadanos, es fundamental en una sociedad libre y digna, algo que podría convenirle mucho a Castillo ahora, pero que podría traerle muchos problemas después.

Esta segunda vuelta partió en dos al país como en 2016, con la diferencia que, ahora, la polarización ha sido mucho mayor porque la pandemia exacerbó la crisis y empujó a todos a extremos representados en esta elección que confrontó a dos visiones del futuro, con anticuerpos inmensos en ambos lados.

Por ello, a la mitad no es que le preocupe el triunfo de Castillo, sino que hasta la aterra, pero incluso a quienes están en esa actitud o, mejor dicho, empezando por ellos, hay que decirles que la democracia implica que el que logra más votos en una elección, aunque sea uno, gana el derecho a gobernar.

Así debe ser aun cuando Castillo haya ganado por el sentimiento legítimo de protesta de mucha gente por los efectos destructores de la pandemia en muertes, empleos y pobreza, así como por la crisis moral de la política, lo cual llevó a obviar su carencia de programas y equipos –nunca presentó un plan de gobierno para el lustro y sus técnicos eran distintos en cada presentación–, o la evidente precariedad demostrada para ejercer la presidencia.

A pesar de todo eso, la mayoría votó por Castillo y él debe ser el presidente porque la democracia se debe respetar.

Pero, justamente por eso, Castillo debe saber que las reglas de la democracia se respetan no solo para ganar la presidencia, sino para ejercerla, incluyendo el respeto a quienes no votaron por él y piensan diferente que él, así como a la constitución y las leyes.

Eso le debe quedar claro al señor Castillo, pues en la campaña no demostró respeto por la institucionalidad, tuvo rasgos autocráticos, y no le interesó la defensa de asuntos fundamentales como la libertad de expresión.

Será mejor, por ello, que el señor Castillo sea notificado, por si aún no lo sabe, que ganar la presidencia de la república no es un cheque en blanco.

Newsletter Augusto Álvarez Rodrich en LR

Suscríbete aquí al boletín de Augusto Álvarez Rodrich en La República y recibe en tu correo electrónico, todos los viernes, las ediciones de su programa “Claro y directo” y su columna diaria.